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Curiosidades de cine

¿Es realmente Wonder Woman un icono feminista?

El personaje de DC Comics llega a las pantallas de cine, interpretado por Gal Gadot, y rodeado de polémica por sus orígenes relacionados con el sadomasoquismo.

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Wonder Woman llega a las pantallas de cine convertida desde hace décadas en un icono del feminismo. Sin embargo, esta superheroína no fue siempre tan feminista como ahora y la 'La Noche De…' ha querido indagar en sus orígenes.

La "Mujer Maravilla" está encarnada en la película de Patty Jenkins por Gal Gadot, actriz de la saga Fast and Furious nacida en Israel y tan dura como el personaje que interpreta en las pantallas. Gadot estuvo dos años en el ejército de su país, llegando a ser instructora de combate, gracias a su gran experiencia en artes marciales y armas de fuego. Curiosamente, antes de ser soldado, ganó el concurso de Miss Israel consiguiendo así la mezcla perfecta de belleza y dureza para encarnar a Wonder Woman.

En un principio, el personaje fue creado como un icono de la sumisión, plagado de referencias al erotismo sadomasoquista. Es decir, que el original tiene más que ver con Cincuenta Sombras de Grey, que con la emancipada superheroína que conocemos hoy en día.

Los cómics llegaron a los kioscos, por primera vez, en diciembre de 1941 y fueron creados por un hombre. Se trataba del peculiar William Moulton Marston, que además de guionista, era psicólogo e inventor. Su invento más conocido fue el detector de mentiras, pero lo más asombroso es que este hombre defendía públicamente las "bondades de la sumisión" en las relaciones íntimas de pareja. Y eso estaba muy presente en los cómics de la "Mujer Maravilla", que siempre terminaba atada, encadenada o amordazada de todas las formas imaginables.

Moulton formó una peculiar familia con su esposa Elizabeth Holloway, su amante Olive Byrne y con los cuatro hijos que tuvo con ambas mujeres, llegando a vivir todos juntos en la misma casa. Tras la muerte de Moulton por paro cardíaco, las dos mujeres siguieron conviviendo durante 40 años, hasta que la amante falleció en los años 80.

Ambas colaboraron en los cómics supervisando juntas los dibujos de nudos y mordazas para asegurarse de que fueran fieles a la realidad. Por supuesto, esos detalles fueron suavizados en la teleserie de los años setenta, pero aún así, los protagonistas aparecían atados o amordazados al menos una vez por capítulo. La serie estuvo cuatro años en antena y convirtió en un sex symbol a su guapísima protagonista, Lynda Carter, que antes de ser actriz ganó el título de Miss Mundo.

El personaje fue perdiendo su componente "sadomaso" con el paso de los años, hasta convertirse verdaderamente en una heroína feminista. Por algo Wonder Woman fue nombrada, a finales del año pasado, embajadora especial de la ONU para el "Empoderamiento de la Mujer".

Por desgracia, sólo dos meses después, la ONU le retiró el título al recibir muchas quejas acusando a Wonder Woman de ser un personaje "excesivamente sexualizado". Aún así, películas como Batman contra Superman han demostrado que la "Mujer Maravilla" está a la altura de cualquier superhombre y la inminente película Wonder Woman espera demostrar, definitivamente, que las chicas ya no son la comparsa del héroe en el cine de acción.