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cultura

Reconocimiento

Eusko Ikaskuntza recibirá la Medalla de Oro de San Sebastián

Agencias | Redacción

La Junta de Portavoces ha decidido por unanimidad otorgarle dicho galardón a la Sociedad de Estudios Vascos “por su labor en pro del desarrollo de la cultura vasca y su vinculación con la ciudad”.

  • La junta municipal de portavoces ha acordado dar el premio por unanimidad

    La junta municipal de portavoces ha acordado dar el premio por unanimidad

Euskaraz irakurri: Eusko Ikaskuntzak Donostiako Urrezko Domina jasoko du

El Ayuntamiento de San Sebastián concederá la Medalla de Oro, su máximo galardón, a Eusko Ikaskuntza, que este año celebra el centenario de su nacimiento.

La Junta de Portavoces del consistorio donostiarra ha acordado por unanimidad conceder esta distinción a Eusko Ikaskuntza, tal y como ha dado a conocer el alcalde, Eneko Goia, en un acto público.

El consistorio reconoce así la labor de esta entidad "en pro del desarrollo de la cultura vasca" y destaca también "la estrecha vinculación que durante estos 100 años ha mantenido esta institución con la ciudad".

Eusko Ikaskuntza se fundó oficialmente el 22 de diciembre de 1918 en San Sebastián a iniciativa de las diputaciones de Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Navarra, "con el fin de investigar la cultura vasca y de buscar soluciones a diversos problemas de la sociedad".

El Ayuntamiento subraya que la aportación de esta institución a la cultura vasca y su labor para acercar la cultura universal "ha sido de tal calado que ha sentado unas bases sólidas para comprender el País Vasco actual".

Además, Eusko Ikaskuntza ha contado desde el inicio con el apoyo como socio del Ayuntamiento donostiarra, "que ha acogido y apoyado numerosas actividades desarrolladas" por la entidad en la ciudad.

Eusko Ikaskuntza une su nombre a una lista de ilustres personalidades, entidades y colectivos que recibieron esta distinción, como Mikel Laboa (2009, a título póstumo), Aranzadi (2005), las víctimas del terrorismo (2003), Pedro Miguel Etxenike (2000), Gregorio Ordóñez (1995, a título póstumo), Eduardo Chillida (1992) y Jose Migel de Barandiaran (1990), entre otros.