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Crisis

'He sido objeto de un linchamiento personal desde los medios'

Redacción

El presidente rojillo ha demorado la entrega del plan de viabilidad solicitado por la Hacienda foral, lo que implica retrasar su dimisión de forma oficial como máximo responsable del club navarro.

El presidente de Osasuna, Miguel Archanco, ha asegurado que se considera objetivo de un "linchamiento personal desde los medios de comunicación".

"He sido objeto de un linchamiento personal muy, muy, muy, muy duro desde los medios de comunicación. Lo he pasado muy mal y mi familia también", ha declarado a los periodistas que han aguardado en el estadio El Sadar una reunión entre el presidente y los miembros de su directiva y varios empleados del club.

El presidente rojillo ha demorado la entrega del plan de viabilidad solicitado por la Hacienda foral, previsto para este viernes, lo que implica que también retrasa su dimisión de forma oficial como máximo responsable del club navarro, según ha anunciado, al próximo lunes.

Así lo ha asegurado Archanco tras una reunión de urgencia que ha tenido en el estadio El Sadar con sus directivos, con la única ausencia de Sandro Bandrés, y varios empleados del club.

Tanto parte de su directiva como empleados de la entidad le han planteado al presidente diferentes propuestas para no abocar al club a que a partir del próximo viernes Osasuna sea dirigida por una comisión gestora formada por socios por sorteo, hasta que sea elegido un nuevo presidente, previsiblemente en agosto.

Sin embargo, Archanco no ha accedido a estas alternativas y por lo tanto se mantendrá la asamblea general extraordinaria del próximo viernes día 20, en la que se solicita a los socios compromisarios la autorización de elecciones a la presidencia.

Deuda de 40 millones de euros

El presidente 'rojillo' había emplazado al día de hoy a entregar el plan de viabilidad a la Hacienda foral, a la que el club adeuda unos 40 millones de euros, y comprometerse a dimitir en la primera quincena de junio.

Se trata de una situación de alerta en el club, según empleados cualificados de la entidad, al entender que es prioritario tomar decisiones de importancia en estos momentos, tras el descenso a Segunda, con la prioridad de hacer frente a los pagos de la plantilla para no correr el riesgo de descender a Segunda B.

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