Curiosidades -

Célebres bautizos

Hitler, Napoleón, Kennedy, Blanca Nieves y Tarzán 'viven' en Uruguay

María Placer, Desdichado, Pacífico, Remember, Ermitaño, Waterloo, Addisabeba, Oscar Wilde, Einstein, Repúblico, Kremlin, Victoria Celeste, Dosauno o María Vuvuzela, nombres que también gustan.

A.I.

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Si Hitler levantara la cabeza jamás imaginaría que varias personas usan su apellido como nombre de pila en Uruguay, donde una regulación insuficiente y la inventiva popular han dejado registros tan sorprendentes como Napoleón, John Kennedy, Blanca Nieves, Einstein, Tarzán, Préstamo, Oxígeno o Demencia.

En pleno siglo XXI y a miles de kilómetros de Alemania, el fantasma del dictador nazi ha aparecido por el país sudamericano cuando en una localidad de Uruguay un hombre de 70 años mató de un tiro a su pareja de 38 y luego se suicidó.&' || 'nbsp;Un suceso más de no ser porque el autor del crimen se llama Hitler Aguirre Fuentes, un nombre que comparte con al menos otros tres compatriotas, cada cual con una curiosa historia detrás.

Uno de ellos, Hitler Ignacio Da Silva, de 71 años, debe el nombre a su padre, policía de profesión y que, no contento con ello, intentó registrar a su hermano como Mussolini pero la madre de los niños lo impidió. Da Silva, que junto con Aguirre llegó a protagonizar un documental llamado ''Dos Hitleres'', asegura que nunca quiso cambiarse el nombre pese a las peleas que le ocasionó de niño y a que en un viaje a Buenos Aires varios hoteles se negaron a admitirlo.

La razón de este curioso fenómeno, según el director del Registro Civil uruguayo, Adolfo Orellano, es que durante la primera mitad del siglo pasado, cuando el esplendor económico de Uruguay abrió sus fronteras a un torrente de cultura desde distintas partes del globo, ''no había ningún control en la inscripción de los nombres''. Por ello es fácil encontrar en la guía telefónica nombres como Tarzán, Napoleón, María Placer, Desdichado, Pacífico, Remember, Ermitaño, Waterloo, Addisabeba, Oscar Wilde, Einstein, Repúblico, Kremlin, Blanca Nieves y John Kennedy.

Los arrebatos futboleros de los padres han dejado también joyas como Victoria Celeste o Dosauno, por el campeonato del mundo que Uruguay ganó en 1950.La fiebre ha renacido tras el Mundial de Sudáfrica, en que la selección uruguaya fue cuarta, como lo demuestra la reciente inscripción de un Mario Abreu, por el delantero Sebastián Abreu, y el intento de registrar a una María Vuvuzela.

Según Orellano, en los años ochenta se promulgó una ley que prohíbe los nombres ''extravagantes, inmorales, ridículos o que generen equívocos respecto al sexo'', pero la decisión final de inscribir a un ciudadano recae todavía en los funcionarios del Registro Civil, intérpretes últimos de la norma.

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