La presencia de anchoa en el Cantábrico triplica la del año pasado

El índice de biomasa de juveniles de anchoa en el Cantábrico triplica el registrado el año pasado, que a su vez alcanzó el mayor nivel de todas las campañas de estudio realizadas en la zona desde 2003, según ha informado hoy en Bilbao la consejera de Pesca del Gobierno Vasco, Pilar Unzalu. La consejera ha destacado que, si esta biomasa de juveniles evoluciona favorablemente, la próxima primavera podría haber en el mar cerca de 100.000 toneladas de ejemplares adultos, el doble que en la anterior campaña. Esta cantidad se situaría muy por encima de las 35.000 toneladas que las autoridades comunitarias han establecido como límite por debajo del cual se consideraría la pesquería sobreexplotada, lo que llevó en 2005 a su cierre. Solamente este año se han podido reanudar las capturas, de forma limitada.

El aumento de anchoa en el Cantábrico, ha recalcado Unzalu, es una gran noticia que permitirá la recuperación del propio sector pesquero y de toda la industria que actúa alrededor, principalmente la conservera.

Los datos son el resultado del estudio Juvena, que realiza Azti-Tecnalia, y deberá ser refrendados por posteriores estudios efectuados por la UE para determinar el máximo de capturas permitidas. Rogelio del Pozo ha señalado que la probabilidad de que las reservas de anchoa superen el próximo verano los niveles mínimos "es muy alta" pero ha advertido de que esta especie "es muy vulnerable a las condiciones ambientales".

En la campaña de este año, según ha informado la consejera, se pescaron en el País Vasco un total de 4,7 millones de kilos, que supusieron unos ingresos de 12,9 millones de euros para el sector. El precio medio fue de 2,72 euros por kilo.