Economía -
Termina la cumbre del Ecofin
Salgado afirma que 'hasta la última caja' aprobará los test de estrés
Trichet, presidente del BCE, ha alabado la gestión española de la crisis mientras 50.000 personas han secundado la marcha de sindicatos europeos en Budapest "por una Europa más social".
Redacción
La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, ha dicho este sábado que "hasta la última caja de ahorros" aprobará la nueva ronda de test de estrés coordinados por la UE, cuyos resultados se publicarán en junio, gracias a las medidas de recapitalización decididas por el Gobierno.
"Con la recapitalización que en este momento se está llevando a cabo, va a facilitar que hasta la última caja de ahorros pueda pasar esos stress test", ha dicho Salgado a la entrada de la última jornada de la reunión informal de ministros de Economía de la UE.
Trichet: ''España está en la buena dirección''
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, ha dicho que España ha tomado en los últimos tiempos medidas que van "en la buena dirección para combatir la crisis y el paro, pero ha pedido proseguir con las "políticas de prudencia".
Trichet ha recordado que el Banco Central Europeo no puede ocuparse de los problemas nacionales a la hora de decidir la política de tipos de interés. "Nosotros somos responsables de la eurozona en su conjunto 17 países y 331 millones de habitantes y la estabilidad de precios es a nivel de este conjunto", ha insistido.
Manifestación de Budapest
Alrededor de 50.000 personas, según estimaciones policiales, han participado este sábado en Budapest en la manifestación convocada por la Confederación Europea de Sindicatos (CES) para protestar por las políticas de recortes y exigir una Europa más social.
La manifestación con el lema "No a las políticas de austeridad, por la Europa social, por un salario y empleo justos", ha coincidido con la reunión de los ministros de Economía y Finanzas de los Veintisiete en Gödöllö, al noreste de Budapest.
En la manifestación han participado representantes de 45 confederaciones sindicales de 22 países europeos, y al término de la marcha los líderes sindicales dirigieron unas palabras a los presentes en la céntrica plaza budapestina "Oktogon".