Una ola de atentados deja 48 muertos y 142 heridos en Irak

Al menos doce personas han muerto y otras 32 resultaron heridas por el estallido de un coche-bomba en el centro de la ciudad de Ramadi, a 100 kilómetros al oeste de Bagdad, según fuentes del Ministerio del Interior iraquí.

El vehículo cargado con explosivos estaba aparcado cerca de una gasolinera y de un puesto de control de la Policía.

En la mañana de hoy domingo, otro coche-bomba ha estallado en el centro de la ciudad de Faluya, a 50 kilómetros al oeste de Bagdad, causando la muerte de tres personas y heridas a otras once, algunas de las cuales se encuentran en estado grave.

Además, un tercer coche-bomba ha hecho explosión en la zona de Al Saqlawiya, en el norte de Faluya. En este atentado, que tenía como objetivo una patrulla de la Policía, fallecido dos personas y otras seis han resultado heridas.

En esa misma área, al menos un agente ha muerto y otras cinco personas han resultaron heridas, entre ellas dos policías, en un atentado perpetrado por un terrorista suicida que ha estrellado un coche-bomba contra un puesto de control.

También, al menos un policía ha muerto y otros dos han sufrido heridas por el estallido de otro vehículo cargado con explosivos al paso de una patrulla policial en la localidad de Halabsa, al oeste de Faluya.

Asimismo, el estallido de una artefacto contra un microbús en el que viajaban guardias de seguridad se ha cobrado la vida de dos personas y ha herido a otras tres en la zona de Abu Graib, a 25 kilómetros al oeste de Bagdad.

Esta ola de atentados se produce a escasas semanas de la retirada de las tropas estadounidenses, prevista para el 31 de agosto.