Sáhara Occidental: todo igual

La agresión, detención y expulsión de un grupo de españoles defensores de la causa saharaui ha servido para recordar la situación del Sáhara Occidental.

Lo cierto es que no hay allí ninguna evolución, ni parece que vaya a haberla en breve. Todo sigue igual; en todo caso, empeorando para quienes defienden la independencia del Sáhara Occidental.

Marruecos continúa llenando el Sáhara con colonos marroquíes y reprimiendo cualquier protesta independentista. El Polisario está a punto de cumplir veinte años en tregua sin que haya visto ningún fruto de su apuesta por la vía pacífica.

La ONU demuestra su ineficacia y su falta de voluntad para llevar adelante el proceso de descolonización del Sáhara. El enviado especial de la ONU, el estadounidense Christopher Ross, no acaba de presentar un plan para llevar a cabo el referéndum que tenía que haberse hecho hace dos décadas. El Polisario quiere que ese referéndum sea para votar sobre la independencia. Marruecos quiere que sea para ratificar el proyecto de autonomía que ha propuesto el rey Mohamed VI.

El nudo que hay que desatar sigue siendo el mismo: el del censo. Marruecos sólo acepta hacer el referéndum si es con un censo en el que figuran todos los colonos marroquíes. Todo el mundo se da cuenta del truco, pero a Marruecos le respaldan Estados Unidos y Francia. Y a los otros miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, que son Rusia, China y Gran Bretaña, este asunto les da igual.

Así que, en estas circunstancias, no cabe esperar que la ONU se implique realmente en arreglar este problema.