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Estados Unidos
Trump: 'El tiroteo de Texas se debe a los problemas mentales del autor'
Así, el presidente de Estados Unidos ha asegurado que la masacre no se debe a las leyes del país sobre tenencia y uso de armas. La Policía ha descartado el móvil racial, religioso o terrorista.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Trump: 'Texaseko tiroketa egilearen buruko gaitzen ondorioz gertatu da'
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha asegurado que el tiroteo registrado el día anterior en una iglesia de Texas no se debe a las leyes del país sobre tenencia y uso de armas, sino a los "problemas mentales" del autor, al que ha definido como "un individuo muy trastornado".
"La salud mental es el problema aquí", ha contestado, interrogado acerca del control sobre las armas de fuego en Estados Unidos, durante la rueda de prensa que ha ofrecido junto al primer ministro de Japón, Shinzo Abe, en el marco de su visita a Tokio.
"Es un problema de salud mental al mayor nivel" porque, "de acuerdo con las primeras investigaciones, (el autor) era un individuo muy trastornado", ha explicado. "Ha sido un incidente muy, muy triste, pero así es como yo lo veo", ha recalcado, según informa CNN.
Trump ya se había pronunciado horas antes en un comunicado en el que ha expresado sus condolencias a los familiares de las víctimas y enviado un mensaje de unidad al pueblo estadounidense. "A través de las lágrimas y la tristeza, permanecemos fuertes", ha aseverado.
La Policía descarta el móvil racial, religioso o terrorista
Por otro lado, la Policía ha descartado que la matanza perpetrada por Devin Patrick Kelley, que mató a 26 personas en una iglesia baptista de Sutherland Springs, se debiera a motivos raciales, religiosos o terroristas y ha atribuido la acción del tirador a causas personales.
"No contemplamos que la acción de ayer se deba a motivos raciales o religiosos; sí podemos decirles que había una serie de problemas domésticos en su familia", ha afirmado la Policía en una rueda de prensa.
Las autoridades también han confirmado que todo apunta a que Kelley acabó suicidándose y han añadido que diez personas, de la veintena de heridos del tiroteo, siguen en estado crítico.