Israel, futura potencia energética

Israel ha anunciado el descubrimiento de un gran yacimiento de gas natural en el mar, dentro de su zona de soberanía económica de 200 millas. Según dicen, es tan grande que podría cubrir las necesidades energéticas de Israel y convertir a ese país en exportador de gas.

Pero en aquella zona tan conflictiva las cosas nunca son tan sencillas. Líbano estima que una parte de esa bolsa de gas queda dentro de su zona de soberanía económica y ya ha avisado que va a reclamar sus derechos.

Ya no faltaba más que esto. Hasta ahora, israelíes y árabes se peleaban por una tierra que no tenía recursos naturales; ahora resulta que sí los tiene, y además es lo que todo el mundo necesita: energía.

Harán falta todavía unos cuantos años para que Israel pueda poner en marcha la explotación del yacimiento; pero, si es tan grande como se ha anunciado, Israel puede conseguir su independencia económica y aumentar su influencia política.

El mercado natural para ese gas será Europa, que está desesperada por dejar de depender tanto del gas de Rusia y busca diversificar sus fuentes de aprovisionamiento. Eso significa que Israel se sentirá más fuerte y hará aún menos caso a las peticiones de que abandone los territorios palestinos ocupados. Y podrá reforzar más unas Fuerzas Armadas que están ya entre las más poderosas del mundo.