Afganistán: Qué lejos está 2014

El año 2014 está demasiado lejos. Al menos, en lo que se refiere a la retirada de las tropas occidentales de Afganistán. La muerte de dos soldados españoles ha vuelto a recordar que los talibanes siguen activos y que no han sido derrotados. Pero es que en la última semana han muerto también dos soldados franceses. Y mañana caerá algún canadiense, o algún holandés, o algún alemán.

Y seguirán llegando noticias escandalosas, como la de esa niña afgana de 8 años muerta cuando llevaba una bomba preparada por los talibanes y el artefacto estalló. O se sabrán nuevos detalles de la corrupción del Gobierno de Hamid Karzai. Y entonces se repetirán las dudas sobre para qué sirve la intervención occidental allí. Y alguien preguntará que para qué esperar a 2014.

Esa es la fecha límite que ha puesto Obama para la retirada de las tropas estadounidenses. En principio, ninguno de sus aliados le ha llevado la contraria en público. Sarkozy, tras conocer la muerte de los últimos soldados franceses, se ratificó en que estos seguirán en Afganistán hasta 2014.

Pero en Estados Unidos y en todos los países europeos aumenta la sensación de que la misión occidental en Afganistán no sirve para nada: ni derrota a los talibanes ni mejora la situación social del país. Les basta a los talibanes con intensificar su ofensiva para conseguir que lo que iba a ser una retirada ordenada y escalonada hasta 2014 se convierta en una desbandada occidental.