Internacional -
Terremoto en Japón
Japón llora a los 20.000 muertos seis meses después del terremoto
En Tokio, además, se sumaron a los homenajes concentraciones de grupos antinucleares para protestar contra la energía atómica y la situación en la planta nuclear de Fukushima.
Redacción
El noreste de Japón se ha paralizado hoy, domingo, para rendir homenaje a las casi 20.000 víctimas del terremoto del 11 de marzo, con un minuto de silencio solo roto en algunos lugares por sirenas de emergencia que marcaron los seis meses desde la tragedia.
A las 14.46 hora local (05.46 GMT), el mismo momento en que hace medio año un devastador seísmo de 9 grados Richter sacudía el noreste japonés, los residentes de lugares como Ishinomaki, una de las ciudades más afectadas, recordaron a las víctimas en silencio, entre lágrimas y con oraciones.
El parque de Hiyoriyama, desde donde se contempla el que era el antiguo puerto de Ishinomaki, aparecía hoy lleno de flores, incienso y mensajes de solidaridad, mientras tras el minuto de silencio comenzaban a retumbar los "taikos", tambores japoneses, desde una isla en medio del río que se adentra en la ciudad. En ese lugar, cercano a la explanada donde cientos de casas fueron tragadas por el tsunami, se creó un gigantesco arcoiris formado con miles de mensajes de solidaridad llegados de todas partes del mundo.
Los homenajes, que hoy se han repetido en numerosos lugares del país, han estado precedidos por actos este sábado en varias de las localidades costeras más arrasadas. En Tokio, a los homenajes se sumaron varias concentraciones de grupos antinucleares para protestar contra la energía atómica y la situación en la planta nuclear de Fukushima, epicentro de la crisis nuclear más grave desde la de Chernóbyl.
El desastre de marzo causó 15.781 muertos y 4.086 desaparecidos, según los últimos datos de la Policía Nacional, además de daños millonarios y un coste de reconstrucción que se estima en 19 billones de yenes (unos 180.000 millones de euros) en los próximos cinco años.
Además, decenas de miles de personas permanecen todavía desplazadas, buena parte de ellas en las 49.000 viviendas temporales construidas por el Gobierno, que prevé levantar otras 3.000 en los próximo meses