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Irán
Muere la joven agredida en el metro de Teherán supuestamente por no usar velo
Las autoridades defienden que la joven de 16 años se golpeó la cabeza tras sufrir una bajada de tensión en el metro, pero grupos de derechos humanos han denunciado que fue agredida por no cubrirse con el obligatorio velo islámico.
agencias | eitb media
Euskaraz irakurri: Hil egin da Teheranen ustez beloa ez eramateagatik larri zauritu zuten neska adingabea
La joven Armita Garavand murió este sábado tras pasar 28 días en coma después de un supuesto altercado con las autoridades por no llevar el velo islámico en el metro de Teherán, ha informado la agencia estatal IRNA.
Las autoridades iraníes han defendido que la joven de 16 años se golpeó la cabeza tras sufrir una bajada de tensión en el metro de la capital, pero grupos de derechos humanos han denunciado que fue agredida por no cubrirse con el obligatorio velo islámico.
Imágenes de seguridad difundidas por IRNA muestran como Garavand y dos amigas entran en unos de los vagones del metro de la capital y a continuación dos de ellas salen cargando a la tercera, vídeo que han usado las autoridades para demostrar que no se produjo ninguna agresión.
Amnistía Internacional, sin embargo, afirmó que el vídeo ha sido manipulado con la aceleración de fotogramas en cuatro secciones y hay lapsos de más de tres minutos en la grabación hecha pública.
Las organización kurda de derechos humanos Hengaw, con sede en Oslo, ha denunciado que la joven fue agredida por no llevar el velo islámico, obligatorio en el país desde 1983.
El caso es similar al de la joven Mahsa Amini, quien murió hace poco más de un año tras ser detenida por la llamada policía de la moral por no llevar bien puesto el velo islámico, una muerte que las autoridades atribuyeron a causas naturales.
Su muerte provocó fuertes protestas que durante meses pidieron el fin de la República Islámica y solo desaparecieron tras una represión que causó 500 muertos, la detención de al menos 22.000 personas y en las que fueron ejecutados siete manifestantes, uno de ellos en público.
En los últimos meses el Gobierno iraní está tratando de reimponer el uso del velo, con la presencia de patrullas en las calles, la denegación de servicios y la aprobación de una ley que endurece los castigos por no cubrirse el cabello.