Sociedad -
Funeral
Azpeitia ofrece un emotivo adiós al montañero Benantxio Irureta
Falleció este sábado en el monte Aneto, tras caer en el denominado 'Paso de Mahoma'. El funeral en su memoria se ha celebrado en la parroquia San Sebastián de Soreasu.
Redacción
Los restos mortales de Benantxio Irureta han sido incinerados esta mañana y por la tarde, el Club de Montaña Lagun Onak le ha hecho un homenaje. A las 19:00 se ha celebrado el funeral en la Iglesia Parroquial de San Sebastián de Soreasu.
El domingo por la tarde mucha gente se acercó a Azpeitia a dar el último adiós a Irureta. Además de ser un referente en la montaña, todos destacaron lo buen amigo que era.
Al mediodía trasladaron a Azpeitia el cuerpo sin vida del montañero vasco Benantxio Irureta, fallecido el sábado en el monte Aneto.
El montañero azpeitiarra de 59 años falleció en el monte Aneto, tras caer en el llamado "Paso de Mahoma". Junto a él viajaban otros montañeros vascos.
Una vez localizado el cadáver, aproximadamente a unos 300 metros de la cima, se realizó una complicada operación de rescate para que del helicóptero pudieran descender dos especialistas y el médico. Tras comprobar su muerte, procedieron a su traslado a un hospital cercano a Benasque, para realizar la pertinente autopsia.
Montañero experimentado
Irureta nació en Aizarna, pero residía en Azpeitia desde hacía varios años. Era un montañero muy conocido, y fue el primer vasco en subir un ochomil junto al montañero Josu Bereziartu.
Un amigo del fallecido, Jesus Mari Mendizabal conto cómo ocurrió el accidente en el programa "Hiru Erregeen Mahaia" de Euskadi Irratia.
Mendizabal relató que el accidente ocurrió a la entrada del "paso de Mahoma". En ese momento Irureta se encontraba junto a un grupo de 11 montañeros tal y como confirmó Mendizabal.
Irureta era un montañero experimentado. Conocía bien las montañas del Himalaya, Andes o Alpes y entre sus logros está el haber formado parte de la primera expedición vasca en hollar la cima del Dhaulagiri VII.
Expedición Sakana-Pumori
Benantxio Irureta fue jefe de la expedición Sakana-Pumori en la que fallecieron cinco montañeros vascos.
Los cinco fueron sorprendidos por una avalancha cuando se encontraban a 6.000 metros de altura escalando el monte Pumori (de 7.161 metros). La expedición "Sakana-Pumori" estaba formada por siete montañeros guipuzcoanos y tres navarros. El accidente ocurrió en 2001 y el propio Irureta contó en Euskadi Irratia la tragedia del Himalaya.