Sociedad -
En el Hospital San Rafael
El funeral por Miguel Pajares se celebrará hoy en Madrid
Tendrá lugar en el Hospital San Rafael. En la capilla de este centro sanitario se celebrarán las exequias antes del entierro, en el panteón de la congregación religiosa.
Redacción
El funeral por el misionero Miguel Pajares tendrá lugar este miércoles a las 11:30 horas en el Hospital San Rafael de Madrid. En la capilla de este centro sanitario se celebrarán las exequias antes del entierro en el panteón de la congregación religiosa.
La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, asistirá al funeral Ya eucaristía será oficiada por el arzobispo de Toledo y presidente de la Comisión Episcopal de Misiones y Cooperación con las Iglesias, Braulio Rodríguez. Desde primera hora de la mañana han llegado al centro hospitalario numerosas coronas, que están expuestas en la entrada del recinto, como la enviada por los reyes de España y la presidencia del Gobierno de Castilla-La Mancha.
Los restos mortales han sido incinerados en el tanatorio-crematorio de Collado Villalba (Madrid), según ha confirmado la Consejería de Sanidad madrileña y la empresa de servicios funerarios Parcesa.
Desde la orden Hospitalaria San Juan de Dios a la que pertenecía el misionero, su portavoz, ha expresado su agradecimiento a todas las personas que les han apoyado.
El padre Pajares, contagiado de ébola en Liberia, falleció ayer en el Hospital Carlos III de Madrid. El religioso, que estaba siendo tratado por el "suero milagroso", el medicamento ZMapp elaborado por Estados Unidos, llegó a España la semana pasada procedente de Monrovia, junto con la hermana Juliana, que dio negativo en los test del ébola.
Pajares ha sido el primer español y europeo afectado por esta dolencia, para la que por el momento no existe vacuna.
Fuentes hospitalarias han relatado que el paciente, quien cumplía su quinto día de ingreso hospitalario tras ser repatriado desde Liberia el pasado jueves, estaba en "condiciones críticas" y que, durante las últimas horas, experimentó una "bajada de constantes vitales".
Pese a que los médicos "probaron alguna medicación en un intento de estabilizarlo", la cámara y los monitores con los que era observado "mostraban que tenía problemas para respirar" hasta que el enfermo ha dejado de "mostrar actividad" esta mañana.
'Un final feliz'
La familia del sacerdote español cree que su muerte "ha sido un final feliz". La muerte del religioso ha cogido, sin embargo, por sorpresa a su familia que creía que permanecía estable en el hospital. "La noticia nos ha sorprendido pero creo que es un final feliz, quizás el mejor, aunque parezca una barbaridad, porque si Miguel tiene que vivir con la pena de la muerte de sus compañeros del Hospital San José no hubiese podido estar en paz,", ha explicado la prima del religioso, Begoña Martín, tras enterarse por los medios de comunicación de la muerte.
Repatriado desde Liberia
El pasado 4 de agosto se conocía que el sacerdote español permanecía aislado en el hospital San José de Monrovia (Liberia), junto a otros trabajadores del centro sanitario, tras la muerte por ébola de su director, el hermano Patrick Nshamdze.Los análisis confirmaron al día siguiente que Pajares había contraído la enfermedad y pocas horas después de confirmarse su estado de salud, el Ministerio de Sanidad informó de que sería repatriado a España.Fue el 7 de agosto cuando el Airbus A310 del Ejército del Aire medicalizado en el que viajaba el sacerdote aterrizó a las 08.10 horas en la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid) y junto a él viajaba también la monja de origen guineano y pasaporte español, Juliana Bonoha, que no padecía la enfermedad.En el Hospital San José de Monrovia se quedaron ingresados otros tres religiosos compañeros de Pajares infectados de ébola, que también habían estado cuidando al director del centro sanitario Patrick Nshamdze, que falleció por esta enfermedad el pasado 2 de agosto.Dos días después de la llegada a España de Pajares y Bonoha, murió la monja de la Inmaculada Concepción Chantal Pascaline y ayer falleció el religioso y enfermero George Combey.
La hermana Melgar, única supervivienteMientras tanto permanece ingresada en el Hospital ELWA de Liberia, gestionado por la ONG Médicos Sin Fronteras, la hermana Paciencia Melgar. La monja de la congregación de las Misioneras de la Inmaculada Concepción, es la única infectada por ébola que sobrevive de los cuatro religiosos que se desplazaron a Liberia y que se encontraban aislados en el Hospital San José de Monrovia.
El brote de ébola en África Occidental ha causado hasta el momento la muerte de 1.013 personas, es decir, 52 más con respecto al recuento divulgado el pasado viernes, según ha informado hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
18 años en misiones
Miguel Pajares estudió Enfermería antes de ordenarse sacerdote y durante 18 años trabajó en misiones en países, como Irlanda, Ghana o Liberia.En Liberia, precisamente, fue donde pasó los últimos siete años de su vida, en concreto, en el hospital San José de Monrovia, donde el pasado día 2 había muerto de ébola su director, el hermano Patrick Nshamdzea, a quien había cuidado.De 75 años, Pajares, el mediano de cinco hermanos, había nacido en La Iglesuela, una pequeña localidad de apenas 500 habitantes, que está situada en el noroeste de la provincia de Toledo y que había visitado por última vez el pasado junio.A su pueblo tenía previsto volver a finales de este mes o a principios de septiembre. Su idea era regresar por esas fechas a España para quedarse donde le destinaran y continuar su labor.Era miembro de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD) desde los 12 años.