Sociedad -
29 de junio de 2013
El acusado de homicidio en Gernika pide perdón y exculpa a su hermano
"Querían matarle y lo mataron", ha sentenciado el fiscal, y ha añadido que le agredieron y le patearon, y cuando intentó huir, fueron tras él y al darle alcance le apuñalaron cada uno con un arma.
Redacción
Uno de los dos hermanos de origen rumano acusados de matar a un compatriota en junio del año pasado en Gernika, ha reconocido hoy haber apuñalado a la víctima, ha pedido perdón a la familia del fallecido y ha exculpado a su hermano.
En el juicio con jurado popular que se celebra en la sección segunda de la Audiencia de Bizkaia, esta mañana han declarado los dos acusados G.S. y M.M.S., para quienes la Fiscalía pide 14 años de prisión como autores de un delito de homicidio con el agravante de abuso de superioridad, por haber matado de un joven a las fueras de un establecimiento de copas el 29 de junio de 2013.
El primero de los hermanos, G.S., ha tomado la palabra para pedir perdón por los hechos y ha asegurado que aquella noche estaba borracho, por lo que su abogado ha solicitado a los miembros del jurado - compuesto la mayoría mujeres - que tengan en cuenta esta circunstancia atenuante de su responsabilidad.
El hermano menor, M.M.S., ha negado que participara en el apuñalamiento de la víctima y la defensa pide para él la libre absolución.
La fiscal ha explicado al jurado que G.S. tuvo a primera hora de la madrugada un incidente verbal con la víctima en el local y fue a buscar a su hermano para regresar ambos armados con sendos cuchillos en busca del otro joven, con la intención de matarle.
Ha asegurado que cometieron el crimen "de manera conjunta" de forma "voluntaria y plenamente conscientes de lo que hacían".
"Querían matarle y lo mataron", ha sentenciado, para detallar que corrieron tras su víctima, le agredieron y le patearon, y cuando intentó huir, fueron de nuevo tras él y al darle alcance le apuñalaron cada uno con un arma en varias ocasiones.
El joven herido logró ponerse en pié y los dos hermanos continuaron persiguiéndole hasta que, finalmente, cayó en la calle, momento en que los acusados regresaron a su domicilio y aguardaron allí la llegada de la Policía.
La fiscal ha explicado al jurado que hubo abuso de superioridad ya que los dos acusados aprovecharon la circunstancia de que la víctima iba en evidente estado de embriaguez y que le atacaron entre los dos y armados, para que tuviera posibilidad de defenderse.
Ha rechazado que G.S. estuviera ebrio puesto que en la prueba que le realizó la Ertzaintza aquella noche arrojó una tasa muy baja de alcohol en sangre.
En su declaración, G.S. ha afirmado que después de beber orujo blanco de alta graduación y cerveza, fue al pub y la víctima le pidió que se fuera del local, lo que le enfadó y decidió ir a buscar a su hermano para darle una paliza y que no volviera a meterse con él.
Ha dicho que apuñaló a la víctima con "un cuchillo pequeño" que suele usar en su trabajo como agricultor y que no pensó que le causaría tanto daño, pero las dos armas que se han mostrado al jurado como evidencias en este crimen eran dos cuchillos de hoja larga, uno de ellos con la punta rota.
Por su parte, M.M.S. ha contado que aquella noche acompañó a su hermano convencido de que la víctima "no le dejaba en paz" y así, junto a G.S. le persiguieron y le agredieron, pero que él no sólo solo no participó en el apuñalamiento, sino que intentó que su hermano no lo hiciera.
M.M.S. ha negado que haya sido condenado anteriormente por un delito de robo con intimidación por un juzgado de Benidorm, como ha presentado el ministerio público.
La fiscal ha señalado numerosas contradicciones en los relatos de lo ocurrido que han dado los acusados a lo largo del proceso pero ha señalado al jurado que las cámaras de seguridad de la zona y los relatos de los testigos les ayudarán a conocer lo que ocurrió.
Esta mañana han declarado también los agentes que acudieron al piso de los acusados y han explicado que inicialmente llevaron como arrestado a G.M. y que su hermano fue a comisaría solo para acreditar su identidad.
Pero, una vez allí, varios testigos alertaron a los agentes de que M.M.S. también había participado en los hechos y se procedió a su detención.