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Acción en Cofrentes

Greenpeace se enfrenta al 'juicio más duro de su historia'

16 activistas se enfrentan a penas de cárcel y multas de hasta 360.000 euros por la protesta que realizaron en 2011 en la central nuclear de Cofrentes.

Los 16 activistas de Greenpeace durante la primera sesión del juicio. EFE
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Los 16 activistas de Greenpeace durante la primera sesión del juicio. EFE

Redacción

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Dieciséis activistas de Greenpeace se enfrentan a penas de hasta dos años y ocho meses de cárcel y multas e indemnizaciones por un total de 360.000 euros en el juicio que se inicia este jueves por la "protesta pacífica" en la central nuclear de Cofrentes en febrero de 2011.

"Nos enfrentamos al juicio más duro de la historia de Greenpeace", ha lamentado el director de Greenpeace en España, Mario Rodríguez, quien ha añadido que su organización "no elude" la Justicia. Las acciones reivindicativas de la asociación suele acabar en sanción administrativa, aunque en este caso se piden penas de cárcel. Así, Greenpeace considera "excesivas y desproporcionadas" las acusaciones de desorden público, daños y lesiones y cree que detrás hay un "intento de escarmentar".

Iberdrola, propietaria de la instalación, rechaza que la actuación de los activistas fuera pacífica ya que su acción supuso daños materiales y lesiones a dos vigilantes, uno de ellos con una herida abierta por corte con un equipo rotativo en el abdomen. Además, asegura que implicó la declaración de alerta de emergencia en el emplazamiento, un hecho excepcional, puesto que la presencia de los miembros de Greenpeace podría conllevar daños a equipos de seguridad, según las mismas fuentes.

Rodríguez, por su parte, afirma que los activistas "ejercían su deber de proteger el medio ambiente, amparado por el artículo 45 de la Constitución, y su derecho a protestar pacíficamente" cuando realizaron una pintada en una de las torres de refrigeración de la central nuclear de Cofrentes.

Desde Greenpeace se preguntan si es "justo y proporcionado que por pintar 'peligro nuclear' en Cofrentes, 16 activistas y un fotoperiodista independiente puedan acabar en la cárcel". "No puede salir más caro defender el medio ambiente que destruirlo", ha sentenciado Rodríguez, quien ha recalcado que los acusados "entraron al recinto para evidenciar los peligros de la energía nuclear y los problemas de seguridad inherentes a ésta".

El juicio por esta protesta se celebrará desde este jueves y los días 5, 9, 10 y 11 de diciembre en el juzgado de lo Penal número 11 de Valencia. Con motivo del proceso, Greenpeace ha organizado una serie de actividades para el próximo sábado 6 de diciembre, a las que han invitado a todos los valencianos para apoyar "el derecho y deber de defender el medio ambiente, consagrado en el artículo 45 de la Carta Magna".

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