Sociedad -
Crimen cometido en 2008
El juez rechaza archivar el caso del crimen de Legasa
La Fiscalía había solicitado el sobreseimiento de la causa, pero el juez ha decidido seguir con el proceso contra José Antonio Indart por el homicidio de su hijo.
eitb.eus
El titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona/Iruña rechazado archivar el caso del crimen de Legasa y ha acordado continuar la causa por homicidio contra José Ignacio Indart Sarretea, imputado por la muerte de su hijo Iñaki Indart Ariztegi en marzo de 2008.
En la comparecencia celebrada hoy para concretar las imputaciones, el Ministerio Fiscal ha solicitado el sobreseimiento de la causa por la ausencia de indicios de criminalidad contra el imputado, una postura a la que se ha adherido la defensa.
Sin embargo, la acusación particular, ejercida por una tía de la víctima, que se ha personado hoy en el procedimiento, ha expresado su intención de formular acusación contra su cuñado por un supuesto delito de homicidio.
El pasado día 13, el juez instructor apreció "indicios racionales claros" de que Iñaki Indart fue asesinado por su padre, José Antonio Indart.
Además, los indicios apuntan a que el padre arrojó el cuerpo de su hijo "mientras estaba todavía con vida" a una sima de 45 metros de profundidad y de muy difícil acceso en el término municipal de Gaztelu.
Según el juez, la noche del 8 de marzo de 2008, Iñaki Indart estuvo cenando con sus amigos en Santesteban hasta las 03:00 de la madrugada, cuando decidió irse a casa ya que al día siguiente estaba citado como vocal suplente en una mesa electoral de Narbarte con motivo de las elecciones generales.
Sobre las 03:15 horas, una patrulla de la Policía Foral le dio el alto, porque circulaba sin el permiso reglamentario. La interceptación se produjo tras una persecución en la que, en la huida, al joven se le reventaron dos neumáticos y llegó a circular sobre las llantas.
Le sometieron a las pruebas de etilometría y fue denunciado administrativamente y el turismo tuvo que ser retirado por una grúa al presentar importantes daños en los neumáticos.
Iñaki Indart fue trasladado en un vehículo oficial de la Policía Foral hasta la entrada de Legasa hacia las 06:15 horas y, desde allí, según consta en el auto, se dirigió a pie hasta su domicilio, que se encontraba a una distancia de unos 1.400 metros.
En algún punto del camino, según relata el magistrado, se cruzó con su padre, José Antonio Indart, quien, enfadado al conocer el incidente con el turismo, "le golpeó en varias ocasiones en la cabeza", lo que le originó "graves lesiones".
Para evitar ser descubierto, le llevó inconsciente en su todoterreno a la sima Legarra, "donde lo arrojó mientras estaba todavía con vida".
Los restos de Iñaki Indart fueron hallados el 23 de diciembre de 2014 por miembros del grupo de espeleología Satorrak y recuperados el 26 de diciembre.
Según asegura el juez, el joven fallecido sufría malos tratos por parte de su padre, quien llegó a golpearle, y eran "frecuentes los gritos, insultos y humillaciones" por parte del imputado, quien "se irrita con facilidad".