Sociedad -
Accidente
Harán falta al menos 2 días más para llegar hasta el espeléologo fallecido
El operativo para rescatar su cuerpo ha apuntalado ya la primera parte de la cavidad, pero se espera que los trabajos se demoren hasta dos días por la peligrosidad del terreno.
Eitb.eus
Euskaraz irakurri: Beste bi egun beharko dituzte espeleologoaren hilotzeraino iristeko
El operativo que intenta rescatar el cuerpo sin vida de espeleólogo vizcaíno José Gambino, fallecido este pasado jueves al quedar sepultado bajo una roca en una cueva de Galdames, ha apuntalado ya la primera parte de la cavidad y proseguirá los trabajos ininterrumpidamente hasta llegar al punto en el que se encuentra el fallecido, lo que podría llevar dos días.
Sin embargo, la enorme inestabilidad y peligrosidad del terreno obligará entonces a reevaluar la situación y a establecer estrategias, por lo que, de momento, resulta difícil calcular cuándo podrían concluir las labores, según ha explicado el responsable técnico de Emergencias del Gobierno vasco, Gaizka Etxabe.
Miembros de la Unidad de Rescate de Montaña de la Ertzaintza, además de técnicos y espeleólogos, han evaluado durante toda esta mañana el estado de peligrosidad de la cueva de Galdames después de que, a lo largo de la mañana, se llevaran a cabo explosiones controladas y desescombros para intentar avanzar hacia el lugar en el que se encuentra el fallecido y rescatar el cuerpo.
Ante la peligrosidad de la situación, técnicos de la Brigada de Salvamento de Minas de Asturias se han desplazado hasta el lugar para prestar ayuda al operativo desplazado hasta la cueva con el objetivo de acceder al lugar en el que quedó sepultado el espeleólogo de Santurtzi.
En estos momentos, participan en las labores unas 80 personas, entre especialistas de rescate de la Ertzaintza, miembros del grupo vasco de Socorro, la Brigada de Salvamento de Minas de Asturias, Cruz Roja, DYA, Ayuntamiento de Galdames y bomberos de la Diputación de Bizkaia.
A última hora de la tarde de este sábado y tras gestionar material técnico, se ha apuntalado ya la primera parte de la cueva. Tras una primera fase, "se volverá a detonar y a avanzar" con precaución de forma ininterrumpida. Sin embargo, "si todo va bien", se tardará dos días en alcanzar el punto en el que el cuerpo sin vida del espeleólogo se encuentra atrapado.
Entonces, según Etxabe, "comenzará un trabajo infinitamente más duro y de muchísimo riesgo" que se deberá sopesar porque "es una zona muy estrecha, con muchas gateras, muy dificultosa para introducir material y con poca capacidad, muy compleja".
"Nosotros estamos determinados a hacer todo lo necesario, con seguridad, sin prisa para conseguir el objetivo marcado", ha señalado. La zona en la que se trabaja en este momento también es "muy inestable y peligrosa" por lo que las labores se efectúan "poco a poco, y estableciendo estrategia".
Desprendimiento
Según fuentes de la investigación, el joven santurtziarra de 37 años comentó el jueves su intención de realizar espeleología a un compañero que, al no tener noticias de él, organizó un grupo de búsqueda y acudió al lugar de los hechos, donde descubrieron que se había producido un desprendimiento bajo el que se encontraba el fallecido.
La Ertzaintza fue alertada sobre las 00:55 horas y movilizó a diferentes efectivos de su grupo de montaña, así como a una brigada de especialistas en este tipo de rescates acompañados por un médico que confirmó la muerte del espeleólogo.Debido a las dificultades del terreno, que aún se encuentra inestable y con posibilidad de desprendimientos, las labores de rescate del cuerpo están siendo extremadamente complicadas y se prolongarán durante días.
Cuatro metros cúbicos de piedra
Según ha explicado en declaraciones a ETB Gaizka Etxabe, técnico de la Dirección de Emergencias, el cuerpo del espeleólogo fue hallado en torno a las 05:00 horas. El varón fue solo a la gruta, pero advirtió a sus compañeros que preveía salir a la superficie para las 22:00 horas.
Etxabe ha detallado que el cadáver se encuentra en un espacio muy angosto, y que el riesgo de desprendimiento es "muy alto". Los expertos deben apuntalar la zona y planificar el rescate para que todo sea seguro: "Queremos asegurarnos, contamos con tiempo", ha afirmado.
Según el técnico, los equipos de rescate deben descender 15 metros en rapel para luego bajar durante otros 15 minutos.
Extracto de la entrevista realizada a Gaizka Etxabe en el programa "Egun On Euskadi" de ETB1: