Sociedad -
Adicciones
Una de cada cuatro personas es adicta al juego, el sexo o Internet
Psiquiatras y médicos creen que la cultura actual es el caldo de cultivo perfecto para que se multipliquen estas conductas patológicas.
Redacción
El juego patológico, la adicción al trabajo o al sexo, las compras compulsivas y la dependencia de Internet son algunas de las denominadas "adicciones sin sustancia", que esclavizan ya a uno de cada cuatro españoles.
Psiquiatras y médicos de Atención Primaria, que han participado en un seminario sobre este asunto, están alarmados ante el continuo aumento de la incidencia de estos trastornos, cuyo número de afectados crece un 5% cada diez años.
Javier García Campayo, psiquiatra del Hospital Miguel Servet, de Zaragoza, ha explicado que la cultura actual es el caldo de cultivo perfecto para que se multipliquen estas conductas patológicas, que terminan por arruinar la vida familiar, social, laboral y destruir la propia salud. En la mayor parte de los casos, según los expertos, nadie se identifica con estas adicciones y son los familiares los que acuden a la consulta pidiendo ayuda.
Internet se ha revelado como algo "adictivo en sí mismo" -hasta un 15% de la población es adicto a la red- y, además, es "un mercado abierto 24 horas" para quienes quieren paliar su ansiedad por el sexo, las compras, el juego o el trabajo.
José Ángel Arbesú coordinador de Salud Mental de Semergen (Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria) ha señalado que la ludopatía es la adicción más extendida y una de las que conlleva consecuencias más graves. En España, entre el 2 y 3% de la población la sufre, en todas las clases sociales e independientemente de estudios e ingresos.
Hasta un 16% de los españoles son adictos a las compras, unos a lo grande y otros en las "tiendas de chinos", adonde llegan preguntando al dependiente cada día "si hay algo nuevo", ha ironizado el psiquiatra.
Necesitar tener sexo con quién sea y cómo sea un mínimo de tres veces al día, o trabajar más de 50 horas semanales para ocultar una vida insatisfecha -un adicción que afecta al menos al 10% de los españoles- son otras pautas que pueden hacer saltar las alarmas.
Según la Organización Internacional del Trabajo, el 8% de la población activa española dedica más de doce horas al día a su profesión para huir de sus problemas personales y muchos acaban sufriendo enfermedades cardiovasculares.