Sociedad -
Migración e integración
La tolerancia hacia la inmigración aumenta en Euskadi, pese al difícil contexto económico
Según el último informe de Ikuspegi, la mitad de la población de Euskadi está a favor de aceptar las solicitudes de asilo y protección sin ningún tipo de restricción y sólo un 5,7 % de la población cree que la inmigración es un problema.
ANE SANTESTEBAN | EITB MEDIA
En un escenario marcado por la invasión de Ucrania, la inflación o el contexto posterior a la pandemia, ha aumentado el nivel de tolerancia, comprensión y solidaridad de la sociedad vasca hacia la población de origen extranjero que llega a la Comunidad Autónoma Vasca.
Así lo detalla el último informe realizado por el Observatorio Vasco de Inmigración, Ikuspegi. Así, el nivel de tolerancia hacia este colectivo mantiene una tendencia positiva, y su índice vuelve a ascender, esta vez hasta los 69,28 puntos, batiendo todos los récords. Al contrario, los rumores y los estereotipos falsos sobre la inmigración siguen perdiendo peso y cada vez tienen menor presencia y apoyo social.
En los datos publicados Ikuspegi pone especial énfasis en el aumento de la tolerancia por primera vez a pesar de la dificultad del contexto económico y social, ya que hasta ahora, cuando la situación económica empeoraba, la perspectiva de la inmigración también deterioraba.
Según el informe, solo un 5,7% de la sociedad vasca considera la inmigración como problema para Euskadi, el dato más bajo desde que se realiza el estudio.
Beatriz Artolazabal, consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, ha expuesto que "una cultura debe beber de diferentes fuentes porque eso le hará avanzar hacia una sociedad más justa".
"Vamos deshaciéndonos de prejuicios sin una base real. Sobre todo, vamos respetando los derechos fundamentales de las personas migrantes; derechos como labrarse una vida digna e integrarse en la sociedad, como la vasca, de la que han decidido formar parte, sin imposiciones, restricciones y exclusiones", ha señalado.
Artolazabal ha dicho que la ruta del Gobierno se encamina a "construir una sociedad vasca, presente y futura, igualitaria en el acceso a derechos ciudadanos, igualdad en derechos y deberes" y ha concluido parafraseando al Lehendakari Urkullu con un "en Euskadi nadie sobra".