Sociedad -
En Málaga
Un empresario arruinado atraca un banco para que lo metan en la cárcel
El empresario ha pasado a disposición judicial y tras escuchar su declaración, el fiscal lo ha dejado en libertad tras calificar los hechos como una falta de coacciones.
Redacción
Un empresario atracó el lunes una sucursal bancaria de La Caixa en Málaga con el objeto de entrar en la cárcel ya que se sentía ahogado por las deudas y las circunstancias personales. Sin embargo, tras ser detenido y declarar ante el fiscal, éste le puso en libertad.
Poco antes de las 14.00 horas del pasado lunes, un trabajador de la oficina llamó a la Policía Nacional para alertar de que un hombre armado había entrado en su sucursal para atracarla. Tras esta advertencia, los efectivos de la Policía rodearon la zona y desplegaron el dispositivo habitual ante un posible atraco con rehenes.
La situación en el interior de la sucursal, según publica este miércoles el diario 'Sur', era completamente normal ya que los trabajadores continuaban ejerciendo su trabajo, mientras el supuesto atracador confesaba a los rehenes lo que le había llevado a atracar el banco.
"Esto es un atraco", anunció mientras caminaba hasta el primer mostrador de la oficina y se dirigió al empleado que estaba al otro lado. "Voy armado pero no les voy a hacer daño ni vengo a robar nada", confesó.
"Llamen a la Policía, yo solo quiero que me metan en la cárcel", manifestó el supuesto atracador, según confirmaron fuentes cercanas al caso. El intruso entró en la sucursal con la cara destapada, pero guardaba un objeto bajo su abrigo.
Poco después, le pidió a uno de los trabajadores de la oficina que llamara a la Policía.
Cuando los efectivos policiales cercaron la sucursal, un negociador llamó al trabajador que había dado el aviso y le pidió que le pasara el teléfono al supuesto atracador, que confirmó a los agentes su intención de entregarse.
El hombre, de 35 años, pasó el martes a disposición judicial. Por su parte, el fiscal, tras escuchar su declaración, calificó los hechos como una falta de coacciones, en lugar del supuesto intento de robo del que había sido imputado inicialmente por la Policía.