Cerrar

Radio

Radio Euskadi

Radio Euskadi

Entrevista

'La energía obtenida con fracking puede que no se note en la factura'

L.U | EITB.EUS

Juan Cruz Vicuña, ex director de la Sociedad de Hidrocarburos de Euskadi (Shesa), defiende que el fracking es un método seguro. Una herramienta para conseguir energía en Euskadi.

0:00

En Euskadi se consumen 3 mil millones de metros cúbicos de gas natural al año, una cifra que dista mucho de la de producción. En estos momentos la producción de gas en Euskadi es de cero metros cúbicos. Esa es la situación actual cuando sólo un par de los 16 proyectos planteados ante el Ministerio de Industria están en marcha.

Proyectos en los que el año que viene se van a invertir 7 millones de euros en este ámbito energético. Cantidad que se disparará hasta los 22 millones en 2017.

Ante esta situación, la máxima del Gobierno Vasco es buscar alternativas energéticas. Lo plantean como una obligación de cara al futuro y así lo expresaba la consejera de desarrollo económico, Arantza Tapia, al comparecer en el Parlamento hace unos días, y es lo mismo que se plantea en otras instituciones.

El Congreso de los Diputados ya ha dado los primeros pasos para facilitar el fracking a pesar de la oposición de muchos partidos y asociaciones. División que también se da a nivel internacional con Estados Unidos como uno de los referentes del fracking y otros como Francia que han preferido prohibirlo.

El ex director de la sociedad de hidrocarburos de Euskadi, Juan Cruz Vicuña,  entrevistado en Boulevard de Radio Euskadi, ha pedido un debate riguroso a cerca de la extracción de gas no convencional mediante la fractura hidráulica, el fracking.

Vicuña sostiene que hay técnicas disponibles para asegurar un proceso con plenas garantías. EE.UU. es el ejemplo dice, con cerca de dos millones de fracturaciones y sin ningún incidente grave.

El ex responsable de la sociedad pública Shesa, desmonta las mentiras que, dice, rodean a esta técnica. Juan Cruz Vicuña asegura que la explotación de gas no convencional en Euskadi reportaría beneficios económicos, a la hora de negociar las compras en el exterior, y sociales.

Asimismo, advierte que el beneficio de este método no se tiene por qué ver reflejado en un abaratamiento de la factura energética.