Boulevard Magazine
EL ARMARIO DEL TIEMPO
Un submarino alemán es avistado desde la costa guipuzcoana en 1917
El U-boot atacó la costa de Bayona efectuando hasta 18 disparos con su cañón de cubierta contra las fábricas del Bocau, causando daños considerables y varias víctimas
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U-Boot alemán de la Primera Guerra Mundial
12:04 min
Abrimos el “armario del tiempo” para recuperar historias y personajes yque no queremos que sean olvidados, precisamente por el paso del tiempo. Y para ello, el escritor Alvaro Arbina se encarga de “bucear” y rescatarlos.
Estamos en febrero de 1917, es un día gris, con aguas grises y calmadas, la costa vasca está cerca, desde el mar vemos la localidad de Bayona. Tres barcos de marineros procedentes de Hondarribi faenan tranquilamente y de pronto ven emerger de las profundidades de océano, justo junto a las faldas de sus naves, una especie de enorme monstruo marino, también color gris como el plomo. Jamás han visto algo así. Ante ellos se destapa un enorme submarino de la Marina imperial de Guerra alemana, uno de esas máquinas hijas de la revolución industrial y tecnológica de la belle epoque, que durante los años de la Gran Guerra sembraron el terror e toda nave militar y mercante que compartiera ruta con ellos.
El caso ocurrió en el mes de febrero de 1917, y fue reflejado en varios periódicos de San Sebastián. En aquel momento una ciudad importante por, entre otras razones más allá de ser un centro de veraneo de élite, ser lo mismo que Berna o Estocolmo. Es decir: una importante capital de un país neutral en la guerra que llevaba ya tres años desgarrando Europa, desde agosto de 1914. Llaman mucho la atención las diferentes versiones que se dieron del suceso. Los periódicos germanófilos como “La Constancia” no hablaron demasiado sobre el asunto. Los aliadófilos, o al menos anti-germanófilos, desarrollaron largos y detallados reportajes, como es el caso de “El Liberal Guipúzcoano”.
Fue uno de sus corresponsales el primero en llegar al puerto de Fuenterrabía, hoy Hondarribia, después de oír de primera mano disparos de Artillería. Allí se encontró con varios patrones de pesca hondarribiarras recién vueltos de la mar, esos mismos marineros que hemos mencionado al principio. Ellos le hablaron de esa bestia marina hecha de acero y carbón, un U-boot alemán.
El “U-boot” en esta ocasión sólo quería atacar la costa de Bayona. Y eso es lo que hizo, efectuar hasta dieciocho disparos con su cañón de cubierta contra las fábricas del Bocau, causando daños considerables y, al parecer, varias víctimas. Según informó “El Liberal Guipúzcoano”, el fuego del U Boot derivó en una pequeña batalla naval, ya que las baterías costeras emplazadas en Bayona devolvieron los disparos, obligando finalmente al submarino alemán a sumergirse de nuevo.
Así que la costa vasca también se convirtió en escenario de uno de los miles de combates que, en conjunto, durante cuatro años, forjaron, en sangre, fuego y acero, ese hecho histórico que hoy llamamos “Primera Guerra Mundial”.