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Eduard Pujol

"El Estado español se convirtió en una bestia violenta el 1-O"

A Eduard Pujol se le pone “la piel de gallina” recordando ese día pero cree que “lo ocurrido desde entonces nos sitúa mejor para plantearle al Estado que la voluntad de Cataluña no ha desaparecido”.

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El portavoz de Junts per Cataluña en el Parlament Eduard Pujol recuerda en "Boulevard Informativo" de Radio Euskadi la jornada del referéndum independentista del 1 de octubre de 2017 como el día en el que “todo el mundo sabe qué hacía, cómo lo hacía y con quién” porque es un recuerdo “muy vivo y muy intenso”. Afirma que gran parte de la ciudadanía “no pensaba que el Estado español podría actuar con tanta violencia y agresividad, pero lo hizo”. Y añade: “el Estado español se convirtió en una bestia violenta”. “No respetaron las urnas ni la voluntad popular”, dice Pujol, y sentencia que “el Estado español aquel día se pensó que ganó pero perdió. Cataluña le dijo adiós, muchas familias ese día desconectaron de España”.

Han pasado tres años desde esa jornada en la que las imágenes de represión y golpes por parte de los cuerpos policiales en los colegios electorales dieran la vuelta al mundo, y para Pujol el escenario hoy es otro: “ahora Europa entiende que no fue una gente que quiso saltarse la legalidad sino que hubo una gente que quiso expresar una voluntad democrática delante de un estado que ejerce la represión de una manera muy contundente”. Cree que algunas cosas ocurridas desde entonces, como que la justicia europea avalara la condición de eurodiputado de Puigdemont, “nos sitúan mucho mejor para volver a plantear al Estado que tenemos que encontrar una solución dialogada, porque no han desaparecido las ansias, la voluntad y el compromiso de los catalanes” con la independencia.

Acusa al Estado español de querer ejercer “una represión sutil, que Cataluña viva con miedo sin que se note mucho”. Y les acusa de no haber dado ningún paso para acercar posturas con el Govern catalán en tres años: “la hoja de servicios de este gobierno continúa en blanco”.

En cuanto a la relación de su formación con ERC, afirma que gestionar la represión y la pandemia les “obliga a llegar a pactos” y van “encontrando fórmulas”.

No desvela, por otra parte, quién será el candidato o candidata a la presidencia de la generalitat por Junts per Catalunya.