Cerrar

Crónica del Fin de Semana

Corrupción

J. Bosch: "Estamos a la cola de Europa en número de jueces y a la cabeza en número de políticos corruptos"

JOANA SÁNCHEZ | EITB MEDIA

El miembro de "Jueces para la democracia" y autor del libro "La patria en la cartera" asegura que el Estado español está a la cabeza en corrupción política, y añade que es necesario actualizar las leyes para dotar a la judicatura de herramientas para frenar dicha corrupción.

  • "La patria en la cartera" analiza la corrupción en el Estado Español

    El magistrado Joaquim Bosch, durante su intervención en el programa "360º". Foto: EITB Media

    22:23 min
imagen player
imagen player
imagen player

Euskaraz irakurri: Bosch: "Epaile kopuruan, Europako azkenak gara, eta lehenak, berriz, politiko ustel kopuruari dagokionez"

El magistrado Joaquim Bosch, miembro de "Jueces para la democracia" y autor del libro La patria en la cartera, ha asegurado en "Crónica Fin de Semana" de Radio Euskadi que la corrupción supone, cada año, en el Estado español "entre 40.000 y 50.000 millones de euros". Una situación que tiene un precedente claro en la dictadura de Franco, época en la que "la corrupción servía para cohesionar el régimen y permitió que durara hasta el final".

Añade Bosch que la Transición no pudo terminar con la corrupción, puesto que muchos de los ministros del régimen terminaron en partidos políticos, instituciones y consejos de dirección de grandes empresas, tras el fin de la dictadura. Indica, también que la formación de partidos políticos, tanto socialistas como populares, se financiaron con dinero procedente de fuentes dudosas.

Asegura que, en la actualidad, el Estado Español está a la cabeza en cuanto a corrupción política y que es necesaria una actualización de las leyes para dotar a los jueces de herramientas para luchar contra la corrupción política, es más, apunta que el Estado "está a la cola de Europa en número de jueces y a la cabeza en número de políticos corruptos".

El magistrado hace referencia, también a la inviolabilidad del rey emérito y asegura que supone "un efecto demoledor para la credibilidad de las instituciones".