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Dabate Fiscal

Ayuntamientio de Vitoria y SEA enfrentandos por el IAE

La subida del Impuesto de Actividades Económicas enfrenta a la organización empresarial de SEA con el Ayuntamiento de Vitoria cuando los datos sitúan a Araba al frente de la recuperación del empleo.

  • 3:24 min
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La asociación empresarial de Alava - SEA- ha reaccionado con contundencia, en las formas y en el contenido, contra  al acuerdo fiscal en el Impuesto de Actividades Económicas.  En su malestar, la patronal alavesa llega plantearse la suspensión formal  de las relaciones institucionales con el Ayuntamiento de Vitoria.

A SEA no le ha gustado el incremento del coeficiente, ni que se incluya en este impuesto a todas las empresas con una facturación superior al millón de euros. Hasta ahora este gravamen sólo se giraba a las que facturaban a partir de los dos millones euros. Baja el listón y aumenta la recaudación.

La organización empresarial sostiene que el nuevo IAE, acordado entre PNV, Eh-Bildu, Partido Socialista e Irabazi rompe con el que firmó la representación de  SEA, en octubre de 1995,  con el PNV, Partido Popular y Partido Socialista. Recordemos que ese acuerdo, de hace un año, vino a rectificar otro que previamente habían alcanzado Partido Popular y EH-Bildu, contemplando incrementos por encima del 40 por ciento.

El alcalde, Gorka Urtaran, defiende, sin embargo, que no se ha roto ahora  ningún  acuerdo y que la subida aplicada al IAE está en la misma línea de actualización que han sufrido otras tasas y precios púbicos municipales.

La diferencia entre una y otra postura es de cinco décimas si miramos los coeficientes y de poco más de dos puntos porcentuales en la tasa final.

A nadie le ha extrañado que Sea  critique la subida de un impuesto que, como el IAE, tiene ciertamente tiene una naturaleza cuestionable, pero ha llamado la atención que lo haga pronosticando consecuencias dramáticas y amagando con la ruptura de relaciones institucionales.

Unos piensan que no se puede romper lo que realmente no existe, ya que las relaciones de SEA son más habituales con Diputación y Gobierno Vasco que con la institución municipal. Otros, puntualizan que el IAE no es un impuesto tan determinante en la vida de las empresas y menos con las bonificaciones establecidas.

Por unas u otras razones, varios observadores definen la polémica desatada como una tormenta en un vaso de agua, que se disipará en el medio plazo.

En lo que sí coinciden diferentes sectores, tanto en el seno del Ayuntamiento como entre agentes sociales y económicos, es en la necesidad de una reflexión global sobre la fiscalidad en su conjunto, no sólo centrada en el IAE.

La dureza de las expresiones utilizadas por SEA y las desastrosas consecuencias pronosticadas en materia de empleo e inversión han venido a coincidir en el tiempo  con otros datos positivos. Alava ha liderado en Octubre el descenso del paro en Euskadi, con 800 parados menos.

En un año el paro se ha reducido en un diez por ciento en nuestro Territorio. Crecen también las altas en la Seguridad Social. En la otra cara de la moneda quedan 22.797 personas en el paro, según Lanbide, y un debate de fondo sobre la temporalidad y la precariedad. Tanto el cambio de tendencia, del que unos se congratulan, como la baja calidad e inestabilidad del nuevo empleo, que otros  subrayan, forman parte de  una misma realidad acompañada todavía por la incertidumbre.