La noche de
La Noche De
Claudia Cardinale, el ejemplo de una mujer que se alza contra los abusos
EITB
El programa conducido por Félix Linares nos desvela los abusos que sufrió la conocida actriz por parte de productores y cineastas durante su carrera.
Cada vez son más las mujeres que deciden alzarse contra la industria cinematográfica y denunciar los abusos sufridos en silencio durante años. En esta ocasión, el programa La Noche De… ha destapado la historia de Claudia Cardinale, un vivo ejemplo de los abusos vividos en el cine de los 60.
Esta mujer fue toda una musa para el cine europeo, sobre todo italiano, en las décadas de los 60 a los 80, sin embargo, su historia tiene un lado oscuro, y es que fue víctima de una violación y sufrió abusos por parte de productores y cineastas.
Claudia Cardinale cumple, este domingo, 15 de abril, 80 años, y ha cosechado varios premios honoríficos al conjunto de su carrera, en el Festival de Venecia o en el de Berlín, por ejemplo; pero su nombre también ha triunfado en el cine de Hollywood con Los profesionales, Mando perdido, El fabuloso mundo del circo, la primera entrega de La pantera rosa o Misión secreta con Rock Hudson, por nombrar algunas de las películas en las que ha participado.
Su exótica belleza le llevó a ser la protagonista de más de 900 portadas en revistas de 25 países distintos, por lo que era considerada una de las mayores “sex-symbol” de la época. Pero, ¿qué se escondía tras esta aparentemente perfecta vida? Su vida no era tan estupenda como la pintaban los medios, y es que debido a un durísimo contrato en exclusiva, la actriz tenía prohibido engordar, cortarse el pelo y hasta casarse. Sus jefes la tenían completamente sometida y, confirmando los rumores, el programa La Noche De… ha desvelado que Claudia Cardinale se hizo actriz para ocultar una violación.
Víctima de abusos
Al parecer, Claudia entró en contacto con el mundo del cine durante una fiesta en la embajada de Italia en Túnez, lugar de nacimiento de la actriz. Como parte de la fiesta, se celebró un pequeño concurso para escoger a "La italiana más guapa de Túnez" y la joven Cardinale resultó ser la ganadora. Lo que ella no sabía es que el concurso había sido organizado por un cazatalentos del cine italiano, y al ser la ganadora, el hombre se ofreció a ponerla en contacto con productores de cine. Habría sido un sueño hecho realidad siempre y cuando Claudia hubiera deseado alguna vez ser actriz; pero no era este el caso.
Se preguntarán entonces cómo una joven de 17 años, sin aspiraciones a convertirse en una de las más famosas actrices de la época salta al mundo de la fama. Todo cambió para ella una tarde cualquiera en la que, al salir del instituto, aceptó subir al coche de un desconocido que se ofreció a llevarla a casa. Fue entonces cuando todo se torció, aquel hombre la violó y la dejó embarazada. Sin saber qué hacer, sus padres pidieron ayuda al cazatalentos que habían conocido en la Embajada, y este se ofreció a ocuparse de todo, siempre que Claudia le firmase un contrato para ser actriz.
La joven fue enviada a Londres para que pudiese dar a luz allí sin que nadie se enterase del embarazo. De vuelta a Túnez, con la complicidad de sus padres, la chica fingió que su hijo era su hermano y así consiguió evitar el escándalo. A cambio, la joven tuvo que recibir clases de interpretación en Roma, y de este modo, terminó siendo actriz sin haber tenido hasta entonces ningún interés en el mundo del cine.
Contrato abusivo
Con tan solo 19 años la joven actriz pudo rodar su primera película importante, Rufufú, una obra maestra de la comedia. A una edad muy temprana, Claudia Cardinale se fue convirtiendo en una estrella mundial. Pero por muy famosa que fuese, Claudia seguía teniendo un contrato tan abusivo que no podía ni casarse, de hecho, sólo le permitieron saltarse esa cláusula para contraer matrimonio con su productor más importante: el magnate de cine Franco Cristaldi. Fue entonces cuando la actriz pudo finalmente reconocer públicamente a su hijo. El niño, Fabrizio Cristaldi, tomó el apellido de su padrastro.
Tras nueve años de matrimonio, la pareja decidió divorciarse y la actriz puedo al fin librarse por completo del contrato de su juventud, y hacer con su vida y su carrera lo que de verdad deseaba. Así pues, centro sus esfuerzos en su papel como Embajadora de la Unesco. Claudia Cardinale es, sin duda, un vivo ejemplo de cómo una joven empezó su carrera entre presiones y terribles abusos, pero acabó siendo una poderosa mujer que rompió con todo.