La noche de
Reportaje
¿Cómo eran las películas hace 25 años, cuando comenzó "La Noche De..."?
La Noche De | EiTB
El espacio que presenta Félix Linares ha cumplido 25 años. El cine y el mundo han cambiado mucho y así nos damos cuenta si lo analizamos. Antes se fumaba, había cabinas de teléfono, mapas de papel...
El espacio sobre el cine presentado por Félix Linares, "La Noche De…" cumple 25 años y con este motivo, viaja hasta sus orígenes para recordar cómo era el cine y, la sociedad en general, en aquella época.
Meses antes del estreno de nuestro programa, en enero de 1995 llegó a España la película Pulp Fiction, con Uma Thurman y John Travolta como protagonistas. Una de las cosas que más llama la atención hoy en día es cuánto fumaban todos los personajes en aquella época, incluso lo hacían mientras cenaban, entre plato y plato.
Por aquel entonces, también vimos fumar en bares y cafeterías a todo el reparto de Smoke. Asimismo, William Baldwin sacaba un puro en el trabajo, en su caso en una comisaría, en Caza Legal; y Kevin Kline fumaba en el tren, en la comedia romántica French Kiss.
Pocos años antes, aún se fumaba en los aviones y en los aeropuertos, como hacía Bruce Willis en la segunda película de Jungla de cristal, y algunos lo hacían incluso en los cines, como en Amor a quemarropa.
Algo que tenemos ahora y en 1995 también son los teléfonos móviles, como vimos en la comedia Fuera de onda, pero en aquella época la mayoría eran todavía unos auténticos ladrillos. Los vimos, también, en el film Reservoir Dogs.
Quizá por ser teléfonos tan grandes y aparatosos, en las películas de hace 25 años seguían usando cabinas telefónicas, algo que hoy son casi piezas de museo. Robert De Niro y su banda usaban teléfonos públicos en Heat, película estrenada en diciembre del 95.
Tan importantes como las cabinas eran en aquella época los listines telefónicos; verdaderos tochos de papel que hoy casi nadie usa, pero que todavía eran comunes hace 25 años cuando se estrenó en España Dos tontos muy tontos, con los tontísimos protagonistas buscando en el listín la dirección de una chica sin saberse su apellido.
Lo malo de los listines es que, a juzgar por las películas, en Estados Unidos deberían estar todos rotos porque era casi un tópico del cine ver a los personajes arrancando las páginas en vez de apuntar las direcciones o los números de teléfono. A veces, incluso los pisoteaban como hacía Christian Slater en Amor a quemarropa.
Hoy en día casi todos utilizamos internet para buscar números de teléfono o cualquier cosa. Y por cierto, en 1995 ya existía internet, como se pudo ver en La red, estrenada en cines a finales de aquel año.
Aunque por aquel entonces, no todos teníamos acceso a la red y seguíamos yendo a la biblioteca a buscar información de cualquier cosa. Así lo hacía Morgan Freeman en Seven. ¡La de tiempo y asesinatos que se habría ahorrado el viejo Morgan, usando un buscador como Google!
La tecnología de los años 90 resulta hoy un tanto obsoleta, con grandes monitores de pantalla de tubo, todos los datos almacenados en discos y disquetes… Así, vimos como los sofisticados agentes secretos de la primera Misión imposible robaban la información más sensible de la CIA en un vetusto disquete.
Y es que hablamos de una época en la que todavía existían los walkman, en la que aún se veían coches con radiocasete y en la que uno de los negocios más exitosos era el de los videoclubs, hoy ya prácticamente desaparecidos.
En esa misma época, Thelma & Louise circularon millas y millas en coche, sin GPS, porque en aquel entonces, tanto en el cine como en la vida real, usábamos mapas de papel.
Pero el mayor cambio de estos 25 años, ha sido el de las redes sociales; porque con ellas cambiaría por completo el desenlace de una icónica película de 1995, como fue Antes del amanecer. En ella, los entonces jóvenes Ethan Hawke y Julie Delpy se conocían por casualidad en un tren y, después de pasar un día juntos en Viena, se separaban con la promesa de volver a verse allí, seis meses después, sin tener forma de saber nada el uno del otro en todo ese tiempo.
Este desenlace dejaba al espectador con la emoción y el suspense de saber si realmente volverían a encontrarse. Hoy en día, la pareja protagonista podría seguir en contacto a través de cualquiera de las redes sociales o hacerse vídeo-llamadas hasta hartarse el uno del uno.
Ésta son algunas de las pruebas de lo que mucho que ha cambiado el cine y la vida desde que empezó "La Noche De..." hace ya 25 años.