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''Vascos por el Mundo''

Vascos en Guadalupe o Karukera, la isla de las bellas aguas

EITB Media

Ana Gómez, Isabel Galdurotz, Ander Ruiz, Nerea Cambra y Egoitz Goikoetxea han sido los encargados de mostrarnos el archipiélago francés.

  • Pedro Mardones en Guadalupe

    Pedro Mardones en Guadalupe. Foto: Vascos por el Mundo

"Vascos por el Mundo" ha puesto rumbo a Guadalupe, la mariposa del Caribe. Situado en las Antillas Menores, a más de 6000 kilómetros de Euskadi, Guadalupe es un pequeño archipiélago de cinco islas principales pertenecientes a Francia.

Sí, sí, ¡a Francia! Bañada por el Mar Caribe y el Océano Atlántico, Guadalupe es uno de los secretos mejor guardados del país vecino. La silueta de sus dos islas principales, Basse Terre y Grande Terre forman una mariposa, mitad calcárea y mitad volcánica.

Sus primeros pobladores, los arahuacos la denominaron como 'Karukera', la isla de las bellas aguas, hasta que Cristóbal Colón la descubriera en su segundo viaje a América y la bautizara como Isla Guadalupe. Desde entonces, han sido muchos los vascos que han acudido a sus espectaculares paisajes buscando el paraíso. En la actualidad, son en su mayoría fisioterapeutas, ya que en Francia la fisio es un derecho y está cubierto por la seguridad social.

Ander Ruiz, Isabel Galdurotz, Ana Gómez, Nerea Cambra y Egoitz Goikoetxea han sido los anfitriones de esta entrega.

Ana Gómez, cuatro años en el paraíso

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Ana es una fisioterapeuta de Eibar y vive en Saint Francois, uno de los principales municipios costeros de Grande Terre. Está casada con Dani, un madrileño que le robó el corazón en la universidad con el que ha formado una familia. Sus dos hijas, Maya e Iria crecen felices en contacto permanente con la naturaleza.

Ana nos muestra Pointe des Chateaux, un imponente acantilado con forma de castillo situado en el punto más este de su isla, ideal para contemplar el resto de islas: Basse Terre, Las Santas, La deseada, Marie Gallante y la reserva natural de Petite Terre. Acontinuación, nos damos una ducha matutina en la Playa de La Duoche, cuyo oleaje rompe contra las rocas provocando que el agua caiga como en un plato de ducha. Tras darnos ese refrescante baño acudimos a ver su casa, una vivienda familiar con piscina, para recoger a su familia e irnos de excursión a la Cascada de Bis en la Isla de Basse Terre.

Al acabar la jornada, visitamos la playa de Arena Negra de Malendure, que está dentro de la reserva de Jacques Cousteau. En ella, bailamos a ritmo de gwo-ka, el baile criollo típico de la isla y avistamos tortugas haciendo snorkel.

Isabel Galdurotz, una navarra con alma criolla

Isabel es toda una institución en la isla. Dejó Hiriberri con sólo 21 años para marcharse a Francia a aprender francés. En París, conoció a su marido, nativo de Guadalupe y decidieron trasladarse a Isla Guadalupe hace cuarenta años para formar una familia y abrir su propio negocio, un gabinete de podología.

Con Isabel conocemos Pointe à Pitre, la capital comercial, en la que destacan el Mercado Central y la Catedral de Saint Pierre et Saint Paul, ambos con una cubierta de hierro diseñada por el mismísimo Gustave Eiffel.

Ander Ruiz, del mar y la montaña a la selva

Ander es de Zarautz y es fisioterapeuta. Vive y trabaja en un hospital de Le Gossier, cuya playa está presidida por un selvático islote deshabitado.  Vive con su chica Leire de Urretxu y juntos hicieron sus maletas hace 7 años para trabajar en diferentes regiones de Francia como Córcega e Isla Reunión. Su último destino es Isla Guadalupe, donde residen desde hace un año y medio. Nos bañamos con Ander en la playa de la Datcha, frente a la cual está el Islote de Gossier y ponemos rumbo a la Isla de Basse Terre en busca de uno de los puntos más fotografiados de la Isla: las cataratas de Carbet, tres impresionantes cascadas que superan los 100 metros de altura (una de las más altas del Caribe). En compañía de Leire, nos damos un baño en los baños calientes naturales de Capesterre Belle Eau, cuyo agua está calentada por el subsuelo del mismísimo volcán de la Soufrière.

Al atardecer, nos despedimos en desde el faro del Vieux Port. Un enclave inigualable para saltar al Océano Atlántico desde sus acantilados y explorar la fauna marina haciendo snorkel.

Nerea Cambra y Egoitz Goikoetxea, amor surfero

Pese a tener apenas 31 años, Nerea (de Bilbao) lleva 9 años en Isla de Guadalupe. Es fisioterapeuta y tiene dos clínicas junto a sus socios. Como en el resto de Francia, en Guadalupe la Seguridad Social paga los fisioterapeutas, que cobran un 30% más que en la Francia metropolitana, por ser más cara la vida en ultramar.

Conocemos a Nerea haciendo Surf en Anse Bertrand, ya que es el principal motivo por el que se quedó en la isla y por el que vive en el noreste de Grande Terre, donde el oleaje es más bravo. En esa misma localidad visitamos un peculiar cementerio, donde las tumbas son pequeñas casitas decoradas en blanco y negro como si de un tablero de ajedrez se tratase.

Ya en Le Moule, su ciudad de residencia conocemos a su pareja Egoitz (30 años), de Lezo. Ambos se conocieron el pasado verano surfeando y Egoitz no dudó en cruzar el océano para apostar por su amor. Egoitz aterrizó hace 3 meses en Guadalupe y se está abriendo camino con una empresa de alquiler de coches y como Dj. Pinchará alguno de sus temazos desde su terrazau haremos Paddle Surf con la pareja para conocer los manglares de Le Moule.

Mientras que Nerea se va a trabajar, recorremos la Route de la Travesée con Egoitz, una carretera que atraviesa el parque Nacional de Guadalupe, todo un espectáculo para los sentidos. Al llegar a la Maison du Cacao, Egoitz nos explicará todos los detalles de la plantación de cacao y degustamos un chocolate puro al estilo criollo.

Más tarde nos presentará a Jokin, que fue quien le presentó a Nerea hace medio año. Jokin es de Errenteria y también es fisioterapeuta. Apenas lleva medio mes en la Isla Guadalupe, pero conoce a la perfección la isla, ya que vivió casi un año hace siete años. Acaba de llegar a Isla Guadalupe para cubrir las vacaciones de otros fisioterapeutas. De este modo, Jokin ha conseguido encadenar varias bajas y planea estar en Guadalupe y otras islas del Caribe un par de meses. Junto a Jokin y a Egoitz conocemos la elaboración del ron de las Antillas en una destilería-Museo. 

Para acabar nuestro viaje, recogemos a Nerea de su trabajo y hacemos una excursión a la Isla de Las Santas. En dicha isla no se puede circular con coche y sólo se pueden emplear las motos y los carritos de Golf. Los dos puntos fuertes de la Isla son el impresionante Fuerte de Napoleón y la espectacular Bahía de Grand Anse, declarada por la Unesco como una de las bahías más bellas del mundo.