Tubacex atribuye la muerte del trabajador a 'causas naturales'

La dirección de Tubacex ha considerado "imprudente" relacionar con el amianto la muerte de un trabajador este miércoles en una empresa de este grupo en Amurrio (Araba) y ha indicado que el fallecimiento se produjo por causas naturales, debido a una "parada cardiorrespiratoria".

Un trabajador de 58 años, enfermo por su exposición al amianto, falleció en la madrugada del miércoles al parecer por un infarto, cuando se encontraba en su puesto en Tubacex, según informó CCOO.

El empleado, con unos treinta años de antigüedad en la compañía, estaba aquejado de estrés porque se le habían detectado placas pleurales en los pulmones debido al amianto, según dicho sindicato, al que estaba afiliado el trabajador.

En un comunicado, Tubacex ha explicado que "hasta donde se sabe, y a la espera de las pruebas que sean practicadas, la muerte del trabajador se produjo por causas naturales, como consecuencia de una parada cardiorrespiratoria".

La dirección de este grupo industrial fabricante de tubos ha expresado que "lamenta profundamente" la muerte de este trabajador de Acería de Álava, quien era "muy querido en la empresa, en la que trabajaba desde hace más de treinta años y que tiene otros familiares trabajando también en la compañía".

Según Tubacex, "el trabajador no reaccionó a las labores de reanimación practicadas por el servicio médico, que dispone de un desfibrilador por cada planta de la empresa, y que está dotado con un médico y cinco ATS, cuando la ley sólo le exige un médico y un ATS".