Crisis Económica -
PLAN DE AJUSTE DE LAS CCAA
Griñán llevará al TC el límite de endeudamiento para Andalucía
Considera un ataque a la comunidad pasar del 15% inicial al 13,2% el techo de gasto para Andalucía. Mientras, el Gobierno sigue con la 'mano tendida' para que Griñán colabore con España.
El presidente andaluz, José Antonio Griñán, anuncia que la Junta autorizará todos los recursos por vía contencioso administrativa y constitucional contra los acuerdos adoptados en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). En su opinión, el aumento del límite de endeudamiento para Andalucía, pasando del 15% al 13,2%, supone un 'ataque frontal' a esta comunidad que supone romper la igualdad de todos los españoles vivan donde vivan, fruto de un trato discriminatorio que, de hacerse efectivo, supondría un 'golpe durísimo' a la educación y sanidad públicas de los andaluces.
Además, reprocha al PP andaluz la 'mentira' de que la Junta había sido informada de una decisión 'impuesta' por el Gobierno sin comunicación previa.
Con la mano tendida La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, ha negado que el Ministerio de Hacienda está discriminando a Andalucía o a ninguna otra comunidad al fijar los objetivos de endeudamiento aprobados en el Consejo de Política Fiscal y Financiera y ha tendido la mano al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, para profundizar juntos en la línea de colaboración abierta durante la reunión que mantuvo el pasado lunes con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en la que se comprometió trabajar por el 'bien de España'.
Tras advertir de que el nuevo recurso de inconstitucionalidad anunciado por la Junta no es bueno para nadie ni beneficiará a los andaluces, Crespo ha recordado que todas las comunidades autónomas están obligadas a alcanzar el objetivo de déficit del 0,7 por ciento del PIB en 2013 y a cumplir el techo de deuda.
El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, considera imposible elaborar los presupuestos de la Comunidad para 2013 con el nuevo límite de endeudamiento establecido por el Gobierno central, salvo si se cerraran hospitales y escuelas públicas y se opta por la privatización, algo rechazado por Griñán.