Crisis Económica -
Subida de impuestos a ricos
'Lárgate, rico gilipollas'
Libération carga contra el dueño de Luis Vuitton por solicitar la nacionalidad belga, al considerarlo una maniobra para esquivar la subida de impuestos a las grandes fortunas.
Redacción
El hombre más rico de Francia, Bernard Arnault, dueño de marcas de lujo como Louis Vuitton, ha causado una gran polémica al anunciar que ha solicitado la nacionalidad belga, poco antes de que el presidente francés, François Hollande, anunciara una subida de impuestos a las grandes fortunas.
Aunque Arnault ha intentado aplacar el escándalo asegurando que seguirá pagando sus impuestos en Francia, la opinión pública no olvida que hace 30 años, cuando el Gobierno francés prometió endurecer las condiciones a las grandes fortunas, se fue a Estados Unidos durante tres años.
Muestra del enfado que ha provocado su anuncio en aquel país es la portada que el diario Libération le dedica en la edición de papel de este lunes: "Lárgate, rico gilipollas".
El rotativo añade que "aunque diga que no se exilia por razones fiscales, la petición de nacionalidad belga de Bernard Arnault simboliza el egoísmo de los más ricos".
El titular de Libération guarda un doble sentido. Hace unos años, el entonces presidente francés, Nicolas Sarkozy, fue captado por las cámaras arremetiendo contra un agricultor que previamente le insultó. El mandatario le espetó un "Lárgate, pobre gilipollas", y desde entonces la frase ha sido muy asociada a Sarkozy.
Bernard Arnault es presidente del grupo de empresas de lujo LVMH, que posee algunas de las marcas del sector más conocidas del mundo, como las de moda Louis Vuitton y Givenchy; de champán Moët & Chandon y Dom Pérignon; y de perfumería Parfums Christian Dior o Sephora.
Su fortuna, estimada en 21.000 millones de euros, le sitúa el cuarto en la lista de los más ricos del mundo que anualmente realiza la revista Forbes.
El dueño de Lous Vuitton es natural del norte de Francia y los representantes de LVMH han recordado que mantiene relaciones estrechas con Bélgica tanto desde el punto de vista personal como por sus actividades empresariales. Además, tiene domicilio en Bruselas y Dallemagne.
Desde el Partido Socialista se tacha al magnate como "un mimado de la época de Sarkozy", mientras que el ex primer ministro François Fillon, posible sustituto de Sarkozy al frente de la formación conservadora UMP, ha afirmado que la marcha de Arnault es consecuencia de las "estupideces" del actual Gobierno.
Este domingo, el presidente francés, François Hollande, ha anunciado recortes de 30.000 millones de euros. Entre las medidas que serán aprobadas, se encuentra una subida de los impuestos a las grandes fortunas, de hasta el 75% para quienes ganen más de un millón de euros anualmente.