Evo Morales nacionaliza Sabsa, filial de Abertis y Aena en Bolivia

El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha decretado la expropiación de la empresa Sabsa, filial de las españolas Abertis y Aena, que administra los tres aeropuertos más grandes del país, acusándola de haber hecho insuficientes inversiones.

El gobernante ha aducido que Servicios de Aeropuertos Bolivianos S.A. (Sabsa) no hizo suficientes inversiones para ampliar los aeropuertos en El Alto (La Paz), Cochabamba y Santa Cruz, los principales del país, y ha criticado, además, los "sueldos exorbitantes" que percibían sus ejecutivos.

Morales también ha ordenado el despliegue de militares en los tres aeropuertos "para garantizar la continuidad de los servicios".

Sabsa perteneció a la estadounidense Airport Group International hasta 1999, cuando pasó a la británica TBI. En 2004, la empresa de infraestructuras Abertis y el ente público aeroportuario Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) adquirieron TBI con todo el paquete de aeropuertos que administraba, incluidos los tres de Bolivia.

Sexta compañía española que pasa a manos del Estado

La empresa Servicios de Aeropuertos Bolivianos S.A. (Sabsa) es la sexta compañía española que pasa a manos del Estado en menos de un año, ya que en mayo pasado Morales nacionalizó una filial de Red Eléctrica de España (REE) y en diciembre otras cuatro de Iberdrola, por las que aún no ha habido una compensación económica.

Al igual que en anteriores expropiaciones, se ha dispuesto también que la compensación a Abertis y Aena provenga de una tasación realizada por una empresa independiente "en el plazo de 180 días hábiles".

El Gobierno replanteará las relaciones con Bolivia

El Gobierno ha deplorado "profundamente" la decisión del Ejecutivo boliviano de nacionalizar la empresa Sabsa, y ha anunciado que, tras "este acto inamistoso", "muy a su pesar, procederá a replantear el conjunto de las relaciones bilaterales" con el país andino.

El Ministerio de Asuntos Exteriores ha emitido un comunicado para condenar esta nueva expropiación después de que el titular del departamento, José Manuel García-Margallo, advirtiera desde Bruselas de que "tendrá consecuencias sobre las relaciones bilaterales".