Internacional -
Conflicto en Irak
Mueren 22 soldados y policías en choques al sur de Bagdad
El Ejército de Irak centra sus esfuerzos en la ofensiva que ha lanzado para arrebatar a los insurgentes el control de Tikrit. Además, los partidos iraquíes negocian la salida de Al Maliki.
Redacción
Al menos 22 soldados y policías iraquíes han muerto hoy y otros 25 han resultado heridos en duros enfrentamientos con los yihadistas del ISIS al sur de Bagdad, según fuentes policiales.
Decenas de terroristas han fallecido también en esos choques, que se desencadenaron en la zona de Yarf Asajr, a 50 kilómetros al norte de Hila, capital de la provincia de Babel.
Además, el Ejército iraquí ha causado daños materiales en sus vehículos y se ha incautado de sus armas y equipamiento.
Irak se encuentra inmerso en una grave crisis desatada por el avance de grupos insurgentes encabezados por el ISIS, que el pasado día 10 se hizo con el control de Mosul, la segunda ciudad del país, y desde allí ha progresado por otras zonas del norte y el centro.
El Ejército de Irak ha centrado sus esfuerzos en la ofensiva que ha lanzado para arrebatar a los insurgentes el control de la ciudad de Tikrit, a unos 170 kilómetros al norte de Bagdad y cuna del fallecido dictador Sadam Husein.
Los partidos políticos negocian la salida de Al Maliki
Los partidos políticos han comenzado una ronda de contactos que podría propiciar el fin del Gobierno del primer ministro Nuri al Maliki.
Los partidos iraquíes y las potencias mundiales han advertido que, a no ser que las fuerzas de seguridad recuperen las ciudades que se perdieron ante los insurgentes yihadistas y se forme rápidamente un Gobierno que aúne a las distintas comunidades de Irak, el país podría desintegrarse en facciones sectarias y amenazar a todo Oriente Próximo.
Este sábado, un funcionario estadounidense ha afirmado que el rey saudí Abdulá se ha comprometido, en conversaciones con el secretario de Estado estadounidense John Kerry, a alentar a los musulmanes suníes a unirse a un nuevo Gobierno iraquí, con una coalición lo más amplia que pueda combatir mejor a la insurgencia islamista.
Los suníes iraquíes han acusado a Al Maliki de marginarlos y de reprimir a sus comunidades, provocando que las tribus apoyen a la insurgencia liderada por el ISIS. El presidente de la región autónoma del Kurdistán también ha dicho que Maliki debería renunciar.