El ELN dinamita la paz en Colombia

La paz definitiva sigue estando lejos en Colombia. Los atentados cometidos por el Ejército de Liberación Nacional en la región de Barranquilla, con siete policías muertos, han obligado al presidente, Juan Manuel Santos, a suspender las negociaciones con ese grupo guerrillero. Es la primera vez que el ELN atenta en Barranquilla, y además en vísperas de su famoso Carnaval, que comienza dentro de una semana.

Todo eso ha creado una gran indignación en el país y el presidente Santos, que sacó adelante como pudo la negociación con las FARC, ha tenido que suspender las que desarrollaba con el ELN. Es muy extraña la actitud del ELN; lo lógico es que quisiera aprovechar el acuerdo que firmó el Gobierno con las FARC para conseguir un acuerdo similar. Con los atentados de Barranquilla, entierra esa oportunidad. Hasta se dudaba de que hubieran sido ellos, pero han asumido los ataques en un comunicado oficial. A Santos solo le queda medio año en el poder. Y los candidatos a sucederle están en contra de negociar con el ELN y algunos hasta quieren revisar lo que se firmó con las FARC. La capacidad de desestabilización del ELN no es tanta como la que tenían las FARC, pero es suficiente para impedir que haya una paz definitiva y total en Colombia.