Internacional -
Conflicto, Sahara Occidental
El Gobierno saharaui pide a la ONU el despliegue de cascos azules
Ha acusado al Gobierno marroquí de realizar un "montaje de propaganda sucia para justificar su brutalidad" contra los civiles.
Redacción
El ministro de Relaciones Exteriores de la República Saharaui, Mohamed Salem Ould-Salek, ha pedido a la comunidad internacional y a la ONU que intervenga en el Sahara Occidental y despliegue más cascos azules y observadores para proteger los derechos humanos y evitar un "baño de sangre".
En un comunicado, el también miembro del secretariado nacional del Frente Polisario acusa al Gobierno marroquí de realizar un "montaje de propaganda sucia para justificar su brutalidad" contra los civiles saharauis.
"Tras prohibir la entrada de periodistas y de observadores internacionales y una vez consumado el crimen, ahora ofrecen su propia ''verdad'' con puestas en escena donde los civiles saharauis pasan a ser criminales asesinos y sus fuerzas de agresión las víctimas", añade Salem Ould-Salek.
Por otra parte, las asociaciones prosaharuis han difundido en Internet nuevos vídeos de lo que está ocurriendo en El Aaiún.
En uno de ellos se ve a jóvenes en El Aaiún tirando piedras, que son repelidas por un hombre con un fusil.
En este sentido, el delegado del Frente Polisario en España ha asegurado hoy en el Senado que Marruecos que ha entregado cinco cadáveres a sus familias tras el desmantelamiento del campamento saharaui en el Aaiún, y ha denunciado que hay 36 más en las morgues y cientos de desaparecidos. Cucharaya Beyin, 24 horas después de la visita del ministro de Interior de Marruecos a Madrid donde solo reconoció una victima saharaui ha culpado al Gobierno de España de dar oxigeno a Marruecos.
Piden que se condene
Desde Euskadi dos cargos socialistas, la consejera de Empleo, Gemma Zabaleta, y el alcalde de Donostia-San Sebastián, Odon Elorza, se han desmarcado de la actitud del Gobierno de Zapatero ante este asunto. Zabaleta ha dicho que son compatibles la prudencia con la condena, mientras que el alcalde de Donostia-San Sebastián ha exigido una investigación independiente que seguro dará sus frutos tarde o temprano.