La ONU no logra un acuerdo para condenar la represión de Siria

El Consejo de Seguridad de la ONU ha sido incapaz de acordar una declaración de condena a Siria por la brutal represión ejercida contra los manifestantes en los últimos días y que ha causado cientos de muertos y heridos, aunque está previsto que este miércoles sigan las negociaciones.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, sí ha condenado enérgicamente el uso de la violencia contra civiles en Siria, así como en Yemen y Libia, al tiempo que ha pedido su fin inmediato y una solución pacífica para los conflictos en esos países.

Los países han analizado esta noche el proyecto de declaración condenando a Siria por esa violencia que presentaron el lunes Alemania, Francia, Reino Unido y Portugal, y en el que recuerdan al régimen de Damasco "su obligación de cumplir con la legislación humanitaria internacional y de respetar los derechos humanos, incluida la libertad de prensa y de expresión".

Entre lo más reticentes a esa declaración, que también apoya Estados Unidos, estarían Rusia y China, dos de los miembros permanentes y con derecho de veto que de manera general son reticentes a inmiscuirse en situaciones que consideran asuntos internos de un país.

Desde que en marzo comenzaron las protestas en Siria pidiendo reformas democráticas al Gobierno de Assad, de 45 años y en el poder desde 2000, que heredó a la muerte de su padre Hafez al Asad, han muerto más de 400 personas, según diversas organizaciones humanitarias.

Por su parte, el embajador sirio, Elmi Ahmed Duale, ha rechazado las acusaciones, ha lamentado que haya habido "algunas víctimas civiles", y ha afirmado que "las manifestaciones pacíficas en Siria está protegidas por el gobierno". Incluso ha señalado que "Asad considera mártires a todas las víctimas, sean manifestantes o fuerzas de seguridad".