El mandatario ruso no ha dudado en elogiar el plan chino y la postura "constructiva" de Pekín. "Aunque, por ahora, no vemos voluntad" por parte de Occidente y Kiev, ha agregado.
"Muchos de los puntos incluidos en el plan de paz de China están en consonancia con las posturas rusas y pueden servir de base para el arreglo pacífico, cuanto Occidente y Kiev estén preparados para ello", ha asegurado el presidente ruso, Vladímir Putin, al término de la reunión en el Kremlin con el líder chino, Xi Jinping. Eso sí, inmediatamente ha añadido: "Aunque, por ahora, no vemos tal voluntad por su parte".
La iniciativa china defiende la integridad territorial de los países, pero no alude en ningún momento a la anexión rusa de cuatro regiones ucranianas o a la retirada de las tropas rusas. En cambio, sí condena las sanciones contra Rusia y la expansión militar de la OTAN, el principal argumento ruso para el lanzamiento de su campaña militar.
"Rusia y China pueden encontrar una solución incluso a los problemas más complicados", ha subrayado Putin. El mandatario ruso no ha dudado en elogiar el plan chino y la postura "constructiva" de Pekín, pero en ningún momento se ha mostrado dispuesto a ordenar un cese de las hostilidades, el tercer punto, no digamos a sentarse a negociar con el líder ucraniano, Volodímir Zelenski, el cuarto de los doce puntos.
De hecho, su principal asesor para asuntos internacionales, Yuri Ushakov, ha admitido seguidamente que la realización del plan "depende no de la parte rusa y más aún de la china, sino en gran medida de Kiev".
Por su parte, Xi ha asegurado que China apuesta "por la paz y el diálogo", y "apoya activamente la reconciliación y el restablecimiento de las negociaciones" entre Rusia y Ucrania.