Política -
Dimisiones
El presidente del TC rechaza la renuncia de los tres magistrados
El vicepresidente y dos magistrados presentaron su dimisión en protesta por la no renovación de este órgano. En palabras de Eugeni Gay, "tenía la sensación de formar parte de un tribunal secuestrado".
Redacción
El presidente del Tribunal Constitucional, Pascual Sala, ha decidido no aceptar la renuncia del vicepresidente de este órgano, Eugeni Gay, y de los magistrados Javier Delgado y Elisa Pérez Vera, que han dimitido en protesta por la no renovación del tribunal.
Así lo ha informado el Constitucional después de que este lunes a la mañana se conociera que los tres magistrados, cuyo mandato finalizó el pasado mes de noviembre, habían formalizado su renuncia en protesta por la falta de acuerdo entre los grupos parlamentarios del PSOE y del PP en el Congreso para proceder a su renovación.
En un decreto, Sala justifica su decisión de no aceptar las dimisiones de Gay, Delgado y Pérez Vera "dado el volumen de procesos constitucionales pendientes sometido a su conocimiento" y para "garantizar la continuidad y estabilidad" del tribunal, del que recuerda que es el supremo intérprete de la Constitución y el garante máximo de los derechos fundamentales y libertades públicas.
Por ello acuerda "no aceptar" las renuncias, "sin perjuicio de hacer nuevamente presente, en este caso al Congreso de los Diputados, la necesidad de observancia de los plazos de renovación constitucional y legalmente establecidos".
La marcha de Gay, Delgado y Pérez Vera hubiera dejado al Constitucionalcon el quorum mínimo para seguir tomando decisiones, que la leyestablece en ocho magistrados.
Entre los asuntos que el Tribunal Constitucional tiene pendientes de resolver se encuentra el recurso de Sortu contra la prohibición de su inscripción como partido y los recursos contra el matrimonio homosexual, la ley del aborto y la llamada "doctrina Parot".
Gay: "Tribunal secuestrado"
En una carta dirigida al presidente del Tribunal Constitucional Pascual Sala, su vicepresidente Eugeni Gay ha asegurado que tenía la sensación "de formar parte de un tribunal secuestrado". Gay afirma que insistió muchas veces "de manera infructuosa" en la necesidad de dirigirse al presidente del Senado y a los responsables del PSOE y del PP "para que dieran cumplimiento al mandato constitucional" y renovaran a los magistrados designados por la Cámara alta.
"Hoy han transcurrido, desde entonces, cerca de seis meses y, a pesar de las gestiones (...) al más alto nivel institucional, sigue sin sustituirse el compañero del que el día 18 del mes pasado hizo tres años que falleció -lo que no había ocurrido en los 31 años de historia de este tribunal cuando, lamentablemente, se produjeron similares circunstancias- ni ninguno de nosotros tres", ha explicado Gay.
El magistrado asegura que ya quiso renunciar el pasado mes de noviembre, nada más concluir su mandato, pero que se le pidió "expresamente" que no lo hiciera, ya que "había fundadas esperanzas de que en pocos días iban a renovar los dos tercios de magistrados" que habían cumplido su mandato.