Política -
Sanfermines 2023
Finaliza sin incidentes la procesión de San Fermín, pero entre silbidos, abucheos y aplausos
En la calle Curia, al paso de las cruces se han escuchado con fuerza los primeros silbidos de protesta de una parte de los congregados, que han arreciado al paso del Cabildo. Ya con la Corporación han subido los decibelios de los abucheos junto a gritos de "UPN kanpora".
Agencias | EITB Media
Euskaraz irakurri: Istilurik gabe amaitu da San Ferminetako prozesioa, baina txistu eta txalo artean
Unidades antidisturbios de la Policía Nacional, un helicóptero, un doble cordón de seguridad con agentes locales y drones en el cielo se han encargo este viernes de la seguridad en los últimos metros de la procesión de San Fermín, donde a diferencia de años anteriores no se han registrado incidentes.
Con retraso sobre el horario previsto y las calles abarrotadas de gente pese a que los termómetros sobrepasaban los 30 grados, la Corporación ha desfilado por la calle Curia hacia la Catedral entre silbidos, abucheos y aplausos, una muestra de la disparidad de opiniones de la ciudad que han querido hacer convivir algunos vivas a San Fermín.
Precediendo el desfile, la Comparsa de Gigantes y Cabezudos ha recorrido con antelación la calle entre los aplausos del público a su paso, mientras txistulares y gaiteros ponían la música.
Minutos después han llegado a la calle Curia, punto problemático otros años, la Corporación Municipal acompañada por dantzaris, gaiteros y txistularis, cruces parroquiales, Cabildo Catedralicio y Policía Municipal en traje de gala. Ha sido al paso de las cruces cuando se han escuchado con fuerza los primeros silbidos de protesta de una parte de los congregados, que han arreciado al paso del Cabildo.
Ya con la Corporación han subido los decibelios de los abucheos junto a gritos de "UPN kanpora", que se han intensificado al paso de la alcaldesa Cristina Ibarrola, protegida por tres policías municipales ataviados de pamplonicas y rodeada por un cordón de uniformados, mientras una segunda fila de agentes locales intentaba que el público ubicado a ambos lados de la calle diera un paso atrás para aumentar la distancia de seguridad con la regidora.
Del mismo modo ha transcurrido el desfile por la totalidad de la calle Curia hasta la Catedral. Ha sido al regreso de la Corporación al Ayuntamiento cuando se ha visto un ambiente más relajado, lo que ha hecho que en algún momento se abriera ligeramente el cordón policial y los gráficos pudieran fotografiar a la alcaldesa.