Sociedad -
Premios Nobel 2014
El Nobel de la Paz premia la lucha por los derechos de los niños
La joven paquistaní Malala Yousafzai y el indio Kailash Satyarthi han sido galardonados por el Comité noruego.
Redacción
La activista paquistaní Malala Yousafzai, de 17 años, y el indio Kailash Satyarthi, de 60, han sido galardonados este viernes con el Nobel de la Paz 2014.
Los dos activistas han sido reconocidos "por su lucha contra la opresión de los niños y por el derecho de todos los niños a la educación", según ha destacado el Comité Nobel Noruego.
"Los niños deben ir a la escuela y no ser explotados financieramente", ha defendido el Comité Nobel, subrayando que "en los países pobres, el 60% de la población actual tiene menos de 25 años".
En el caso de Satyarthi, ha resaltado que "mostrando gran valor personal" y siguiendo la tradición de Gandhi, "ha liderado varias formas de protesta y manifestación, todas pacíficas, centrándose en la grave explotación de los niños para obtener beneficios financieros". Asimismo, "ha contribuido al desarrollo de importantes convenciones internacionales sobre los derechos de los niños".
En cuanto a Malala, la galardonada más joven de la historia y que ya el año pasado aparecía como una de las favoritas, el Comité explica que "pese a su juventud" lleva años luchando "por el derecho de las niñas a la educación y ha mostrado con su ejemplo que los niños y los jóvenes también pueden contribuir a mejorar sus propias situaciones". Además, "lo ha hecho bajo las más peligrosas circunstancias". "Mediante su lucha heroica se ha convertido en una destacada portavoz de los derechos de las niñas a la educación", ha añadido.
El presidente del Comité Nobel Noruego, Thorbjon Jagland, ha considerado "un punto importante que un hindú y una musulmana, un indio y una paquistaní, se unan en la lucha común por la educación y contra el extremismo".
Malala, una joven activista superviviente de los talibanes
La joven Malala se convirtió en un símbolo del derecho a la educación infantil y femenina en Pakistán por su reacción al asalto del que fue objeto en represalia por su activismo previo.
Al ignorar Malala las amenazas de los talibán, el grupo miliciano Tehrik e Taliban Pakistan (TTP) decidió ordenar su muerte. El 9 de octubre de 2012, tras detener el autobús en el que viajaba por el valle del Swat, los talibanes ordenaron a la joven que se identificara y la dispararon en la cabeza. Otras dos chicas fueron heridas.
Malala, que tenía 14 años en el momento del ataque, sobrevivió contra todo pronóstico gracias a la labor de los médicos y tardó meses en recuperarse tras repetidas intervenciones quirúrgicas.
La activista se empezó a hacer popular en 2009 por escribir un blog para la cadena de televisión BBC en urdu en el que contaba cómo era la vida en Swat bajo el dominio de los talibanes.
Dos años después, fue galardonada con el Premio Nacional de Paz por el Gobierno paquistaní en por sus valientes servicios para promover la paz en las condiciones extremadamente hostiles de Swat. Tras recuperarse de su ataque, Malala reanudó su actividad y el pasado fue galardonada con el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia de Parlamento Europeo.
En 2013 fue elegida por la revista Time como una de las personalidades más influyentes del mundo.