Sociedad -
Inversión de 60 millones
El Hospital de Araba contará con más camas, quirófanos y servicios
El plan de prevé la demolición de un edificio en la sede Txagorritxu y la construcción de uno nuevo para finales de 2018.
Redacción
El Hospital Universitario de Araba (HUA) recibirá 60 millones de euros hasta 2018 (45 en obras y 15 en equipamiento médico) y contará con más camas y quirófanos y con nuevos servicios, como una sala de partos con bañera.
El consejero vasco de Salud, Jon Darpón, ha explicado hoy en una rueda de prensa en el Parlamento Vasco los detalles del Plan de Director del HUA, que prevé la demolición de un edificio en la sede de Txagorritxu y la construcción de uno nuevo para finales de 2018, así como obras de reforma en la sede del Hospital de Santiago.
La primera fase de este plan concluirá en 2018 y para entonces el HUA contará con 519 camas de agudos en Txagorritxu y con 317 de agudos, crónicos y convalecientes en Santiago, donde se ubicará un "potente" centro oftalmológico que concentrará todos los servicios, desde las consultas y pruebas diagnósticas hasta los quirófanos de la especialidad.
En la sede de Txagorritxu las obras comenzarán el año que viene con la demolición del bloque sur, ocupado ahora por rehabilitación, y con la reforma de las antiguas consultas externas.
Además de un aparcamiento, se levantará un nuevo edificio para los quirófanos y servicios asociados, la UCI y el bloque obstétrico, donde se habilitarán cuatro "habitaciones de dilatación-paritorios" que favorecerán que la mujer pase todo el proceso del parto sin ser trasladada de una dependencia a otra.
Además, habrá una sala de parto acuático, como las ya existentes en los hospitales guipuzcoanos del Alto Deba y de Zumarraga.
Txagorritxu verá además ampliada su dotación de quirófanos (en Santiago se mantendrán los actuales) y dispondrá de 22, lo que "aumentará la seguridad del paciente y reducirá los tiempos de espera", ha destacado Darpón.
Las nuevas urgencias serán más amplias y contarán con 50 boxes y 14 consultas. Se mantendrán además las urgencias de Santiago, con lo que los pacientes podrán acudir indistintamente a uno u otro centro y si después los médicos lo consideran oportuno, ordenar su traslado. En los casos más graves será el 112 quien decida adónde se lleva al usuario.
En Santiago se atenderá la hemodiálisis crónica y además se harán obras para reformar los servicios de rehabilitación, cirugía mayor ambulatoria y el citado centro oftalmológico.