Sociedad -
Investigación
Desarticulan un grupo organizado que mutiló 7.000 vacas en Navarra
A los imputados se le acusa de mutilar los cuernos y colas de los terneros para facilitar su manejo en la sala de ordeño.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: 7.000 behi inguru mutilatu zituen talde antolatu bat desegin dute Nafarroan
La Guardia Civil de Navarra ha desarticulado un grupo organizado dedicado a la mutilación "sistemática e indiscriminada" de cuernos y rabos de unas 7.000 vacas nacidas en sus explotaciones ganaderas en la Comunidad Foral.
Esta mutilación, tal y como ha informado la Guardia Civil, se producía con el fin de que el manejo de las mismas cuando entren a la sala de ordeño sea más sencillo para los ganaderos, causa injustificada para menoscabar el dolor crónico que pueden llegar a tener los animales a causa de estas prácticas.
La investigación comenzó a mediados del pasado mes de junio cuando agentes Seprona tuvieron conocimiento de posibles mutilaciones en explotaciones de bovino en Navarra.
Realizaron varias inspecciones a diversas ganaderías con el resultado de la imputación de tres personas por un delito de maltrato animal. Durante las inspecciones los agentes pudieron corroborar cómo ningún animal presentaba cornamenta ni cola.
Igualmente, los agentes tuvieron conocimiento que la técnica utilizada para el desmoche de las terneras, aproximadamente sobre las dos semanas de vida, consistía en la aplicación de un hierro candente en dicha protuberancia.
Del mismo modo, los agentes tuvieron constancia de la técnica empleada para el corte de la cola de los bovinos, consistente en que a los terneros con más de dos semanas de vida, se les administraba anestesia local para posteriormente colocarles una goma elástica en la cola, con el fin de que ésta ejerciera presión y cortara el flujo sanguíneo, provocando de este modo una necrosis, cuyo resultado al cabo de tres semanas era el desprendimiento y caída de la parte necrosada, aproximadamente dos tercios de la cola.
La Guardia Civil ha asegurado que la consecuencia de la amputación de la cola da lugar a la formación de neuromas y éstos pueden causar dolor crónico. Igualmente al no poder ahuyentar a las moscas u otros insectos les genera estrés pudiendo afectar a la conducta y la alimentación, a parte de la posible entrada de insectos o parásitos con las posibles infecciones que pueda acarrear este hecho.