Sociedad -
Caso Nagore Laffage
El Supremo revisa a puerta cerrada el veredicto del 'caso Laffage'
Si se modifica la pena, José Diego Yllanes podría enfrentarse a 20 años de prisión por un delito de asesinato. 5 jueces del Supremo son los encargados de tomar la decisión, que será definitiva.
Redacción
El Tribunal Supremo revisa a puerta cerrada la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) que el pasado mes de marzo confirmó la condena de 12 años y 6 meses de prisión por un delito de homicidio impuesta por un jurado popular, al psiquiatra José Diego Yllanes por el crimen de la joven Nagore Laffage.
En dicha ocasión el TSJN contempló dos atenuantes, la de reparación del daño, ya que Yllanes entregó a la familia de Laffage 126.853 euros, y la de embriaguez leve, mientras que desestimó aplicar las de arrebato y confesión del delito, tal y como había solicitado la defensa del psiquiatra.
Pese a las peticiones de todas las acusaciones personadas, la que representa a la familia de Nagore y otras cuatro populares, el TSJN rechazó declarar los hechos como asesinato. La resolución contó con el voto particular discrepante del magistrado José Antonio Álvarez, que señalaba que el jurado debió estimar la circunstancia de la alevosía y sí calificar de asesinato los hechos.
El sucesoLos hechos se remontan al 7 de julio de 2008. Ese día, la policía encontró el cuerpo sin vida de Nagore Laffage Casasola, natural de Irun, en Orondritz (valle de Erro). Según la investigación, su presunto asesino estranguló a la joven en un piso del barrio pamplonés de Iturrama, en Iruña, le cortó un dedo para dificultar su identificación y enterró el cuerpo entre plásticos en el paraje de Orondritz. Aún así, el cadáver fue descubierto ese mismo día por varios vecinos del valle, que paseaban por la zona.Horas después del arresto, Yllanes fue detenido por la Policía Foral, y reconoció la autoría del crimen ante la juez de instrucción número 2 de Aoiz. La juez decidió enviarle a prisión para evitar "un riesgo de fuga alto".Las investigaciones de la Policía Foral determinaron que no existía relación alguna entre Laffage y José Diego Yllanes antes del de 7 de julio de 2008. De hecho, no ha hallado ningún contacto entre ellos, ni llamadas telefónicas, ni SMSs ni correos electrónicos.