Sociedad -
Juicio 'Caso Cabacas'
Testigo: 'Los ertzainas no disparaban al aire ni al suelo; disparaban a matar'
En la quinta sesión del juicio, varios testigos han afirmado que cuando acudían donde un ertzaina para pedir que llamasen a una ambulancia, la respuesta era "risas y porrazos".
AGENCIAS | REDACCIÓN
Euskaraz irakurri: Lekukoa: 'Ertzainek hiltzeko egiten zuten tiro, eta ez airera edo lurrera'
Testigos de la acusación en el 'caso Cabacas' han asegurado que los ertzainas "empezaron a disparar a diestro y siniestro sin comerlo ni beberlo", sin que hubiera antes lanzamiento de objetos, y además tiraban "directo" como "a matar".
La Audiencia de Bizkaia ha celebrado este martes la quinta jornada del juicio por la muerte del joven aficionado del Athletic, herido de gravedad el 5 de abril de 2012 en una carga policial que realizó la Ertzaintza con motivo de los incidentes que se produjeron en Bilbao tras el partido contra el Schalke 04. El joven falleció cuatro días después en el Hospital de Basurto.
Seis ertzainas que participaron en el dispositivo policial con motivo del encuentro, tres mandos intermedios y tres agentes de base, están acusados por estos hechos. La acusación particular, que representa a la familia de la víctima, solicita para cada uno de ellos cuatro años de prisión por homicidio con imprudencia grave profesional, además de una inhabilitación de seis años.
Por su parte, la Fiscalía y las defensas de los acusados solicitan la absolución.
En esta sesión, han prestado testimonio siete testigos de la acusación particular y cinco más de las distintas defensas. Entre los primeros, ha declarado una enfermera, que se encontraba en la plaza en el momento de los hechos con familiares y amigos, y que atendió a Iñigo Cabacas hasta la llegada de la ambulancia.
Según ha relatado, al enterarse de que había una persona herida, se acercó a él y se percató de que "tenía una herida en la cabeza importe y sangraba muchísimo", por lo que intentó taponarle con bufandas.
"Me di cuenta de que estaba muy grave y fui donde un ertzaina, le grité que llamasen a una ambulancia, que era enfermera, que eran unos sinvergüenzas y unos asesinos, y que le habían reventado la cabeza a un chaval", ha narrado, sin poder contener las lágrimas.
La joven ha explicado que, al ver que "no sabía qué (más) hacer" y que "no era normal que la ambulancia, estando Basurto, no llegase", llamó al 112 "con un ataque de nervios" sobre las 23:42 horas.
Finalmente, llegó la ambulancia y dejó la atención en manos de sus sanitarios, según ha apuntado la testigo, que, al terminar su testimonio, se ha acercado a los padres de Iñigo Cabacas antes de abandonar la sala.
Por otro lado, los testigos de la acusación particular han relatado que la plaza estaba esa noche "llena" de personas de todas las edades, incluidos niños, y en su mayoría no vieron que se produjera ninguna pelea.
Asimismo, han coincidido en asegurar que no vieron que se arrojaran objetos a las furgonetas de la Ertzaintza de manera previa a que se produjeran las cargas policiales.
Según ha asegurado uno de ellos, al llegar las furgonetas, los ertzainas, "sin beberlo ni comerlo empezaron a disparar a diestro y siniestro". En la misma línea, otro de los testigos ha indicado que "primero llegaron dos furgonetas, se bajaron y sin previo aviso empezó la carga; seguido llegaron más furgonetas y también se bajaron y siguieron la carga".
Algunos de los testigos han asegurado que los ertzainas tiraban "directo" y, en palabras de uno de ellos, "disparaban a matar" porque, teniendo en cuenta "la distancia y la altura a la que disparaban, no disparaban al aire ni al suelo".
Los testigos han admitido que, después de que se iniciaran las cargas policiales, sí vieron cómo se arrojaba "algún botellín", aunque, según han explicado varios, las personas que se encontraban en la plaza les increparon y dejaron de hacerlo.
Algunos de ellos han relatado que recibieron "porrazos" cuando salieron a pidiendo una ambulancia. "Hasta que llegó la ambulancia, cada vez que alguien iba donde un ertzaina a pedir, por favor, una ambulancia, la respuesta era risas, porrazos", ha indicado uno de ellos.
Otro de los testigos ha señalado que recibió un "pelotazo" en la espalda y otro ha asegurado que un agente le "apuntó a un metro" con una escopeta.
Entre los testigos de la defensa, ha prestado declaración la persona que, tras oír cómo Iñigo Cabacas caía al suelo, avisó a SOS Deiak, a las 23:40 horas de esa noche, y que ha asegurado que, mientras "hablaba con la doctora" por teléfono, "un agente de la Ertzaintza me mandó salir del callejón sin ningún tipo de explicación, sabiendo que estaba hablando con la ambulancia".
En esta sesión, de nuevo, todos los testigos han sido preguntados sobre el color que vestían los agentes, a lo que la mayoría han dicho haber visto ropas de color oscuro, aunque también algunos han afirmado haber visto tanto a agentes con ropas oscuras como vestidos de rojo.