Detenido en Bilbao por 45 delitos de abuso y agresión sexual a 12 menores

La Guardia Civil ha detenido en Bilbao al presunto autor de 45 delitos de índole sexual a menores. Al detenido, un hombre de 22 años, se le ha investigado por los delitos de abusos sexuales, de agresión sexual, corrupción de menores y difusión de pornografía entre menores. En total, han localizado a 12 víctimas de entre 13 y 15 años en Álava, Bizkaia, Gipuzkoa, Navarra, Barcelona, Tarragona, Zaragoza, Baleares y Sevilla.

Según ha informado la Guardia Civil en una nota, el detenido utilizaba portales web dirigidos a menores para contactar con las victimas a las que posteriormente amenazaba para conseguir material con contenido sexual.

Al detenido se le considera autor de 12 delitos de abusos sexuales a menores, nueve delitos de agresión sexual a menores de 16 años, ya que se considera probado que en el detenido sometió a las víctimas a una intimidación grave, 12 delitos de corrupción de menores, al exigirles hacer determinados actos sexuales explícitos y 12 delitos de difusión de pornografía entre menores, ya que también se pudo acreditar que los archivos que recibía el detenido de los menores, eran a su vez distribuidos entre otros menores con el fin de obtener nuevo material. 

La investigación se inició por la denuncia presentada ante la Guardia Civil en Navarra por una víctima, una menor que estaba siendo amenazada por un hombre al que ya había enviado varias fotos y un vídeo desnuda, y que amenazaba con denunciarla si no le enviaba más imágenes.

Los investigadores lograron identificar al detenido, el cual había contactado con la víctima en una página web destinada a "chatear" en directo con desconocidos de forma aleatoria y anónima a partir de 13 años.

Posteriormente solicitó el número de teléfono a la víctima para poder seguir hablando, ya que cuando cerrase el chat no tendrían forma de volver a comunicarse por ser anónimo. La víctima le facilitó su número y comenzó a recibir mensajes del detenido, con el que siguió conversando con normalidad, hasta que le pidió que le mandase una foto desnuda, amenazándola. Tras enviarle la primera fotografía, el detenido le solicitó más material gráfico, ampliando las amenazas con subir la fotografía recibida a redes sociales.

Del análisis del teléfono móvil del detenido se pudo obtener más conversaciones con otros menores de edad a los que igualmente extorsionaba para lograr que le enviaran fotos íntimas.