Los amigos del autor del crimen niegan haber visto los hechos

Los amigos que acompañaban al asesino confeso de Asier Lavandera, el joven donostiarra apuñalado en enero de 2010 a la salida de una discoteca de Lekunberri, han negado haber visto los hechos y han confirmado que desde el primer momento "el Portu" se autoinculpó.

Así lo han señalado en la segunda sesión del juicio con jurado que desde ayer se sigue en Pamplona contra Sergio Fernando R.S., "El Portu". Uno de ellos, Diego V.M., quien conoce al acusado desde pequeño por haber compartido piso de acogida, ha señalado que al cierre de la discoteca él se fue con una chica a un coche y "El Portu" se quedó con otra, algo que podía haber sentado mal a un grupo de chicos, que comenzaron a golpear a su amigo. El testigo ha asegurado que no vio el momento en que "El Portu" apuñaló a Asier y que tan solo supo lo ocurrido cuando, tras montarse en el coche donde les esperaban los otros dos amigos y emprender camino hacia Pamplona, les confesó que "se había visto apurado porque le había venido con una botella y que le había metido cinco navajazos" a Asier.

Ha recordado que entonces le echó "la bronca porque nos había metido en un marrón. Nos quedamos blancos, estupefactos, y le reprendimos", ha dicho: "No es justificable lo que ha hecho uno, pero tampoco que un pueblo vengan contra dos personas con botellas de cristal", ha subrayado.

El segundo amigo, Kepa M.G., conductor del coche en el que viajaron a Lekunberri los cuatro, ha señalado que estuvieron bebiendo tanto en Pamplona como en la discoteca, al cierre de la cual esperó junto al cuarto amigo dentro del vehículo hasta que llegaron "El Portu" y Diego V.M. y arrancaron hacia Pamplona.

Al contrario que el anterior testigo ha dicho que no oyó que en el viaje el acusado les dijera que había apuñalado a un joven, de lo que se enteró cuando la Guardia Civil les hizo parar en Berriozar.

El cuarto ocupante del vehículo aquella noche, Fernando R.M., ha coincidido con el anterior en señalar que al cierre de la discoteca ambos se dirigieron al coche a esperar a sus amigos y no supieron que había habido una pelea hasta que "El Portu" y Diego llegaron y lo contaron, aunque cuando ya llegaban a Pamplona y el acusado dijo que había asestado cuatro navajazos a un joven.

Después han testificado algunos de los agentes de la Guardia Civil que intervinieron en la instrucción del caso, de forma que el director de la investigación ha recordado que al detenerle, en la ropa interior del acusado se encontró una navaja tipo mariposa con manchas de sangre. Asimismo, los agentes han coincidido en señalar la ausencia de botellas o signos en el aparcamiento de la discoteca de que se hubiera producido la pelea que dice el acusado que ocurrió para justificar su reacción.