Distrito Euskadi
FOOD 4 FUTURE
Nuevos ingredientes, alimentos de diseño, proteínas alternativas y nutrición personalizada
AZTI y EURECAT abogan por compaginar los alimentos tradicionales y los surgidos en laboratorio y por seguir explorando en la naturaleza nuevas fuentes nutricionales que cubran nuestra necesidades básicas y nos ayuden a mejorar el estado de salud físico y mental
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Sofia Roca (AZTI) y Josep de Bas (Eurecat)
22:58 min
El centro tecnológico vasco AZTi y el catalán EURECAT llevan al Food 4 Future su búsqueda de nuevos ingredientes y el desarrollo de alimentos funcionales. Sus representantes, Sofia Roca y Josep del Bas, coinciden: "está prácticamente todo por inventar". La tierra y el mar nos están revelando nuevas fuentes nutricionales, aseguran. De insectos a hongos, pasando por algas, bacterias o vegetales como ejemplos de nuevas fuentes de proteína. Nuevas fuentes que, según Josep del Bas, van a ser más que necesarias para afrontar los requerimientos nutricionales de los 10 mil millones de habitantes que tendrá el planeta en 2050.
Cómo procesar esas fuentes proteicas y nutricionales en forma de nuevos ingredientes o diseñando alimentos es otro de los retos. Surgidos a la manera tradicional del primer sector o bien creados en un laboratorio, la alimentación del futuro deberá también implicar al consumidor de una forma mucho directa y consciente. Los ciudadanos, asegura Sofia Roca, "no tenemos claro qué tenemos qué consumir". "Y debemos conocer qué necesidades nutricionales tenemos", insiste, para luego aprender "cómo nos alimentamos" para cubrir esas necesidades. Y ahí, añade Del Bas, entra también la nutrición personalizada. Una ciencia, la nutrigenómica, cada vez más avanzada, donde se estudia la combinación de nuestra genética y el entorno en el que vivimos y su impacto en nuestra alimentación y salud.
¿Perderemos nuestra cultura gastronómica en pro de una alimentación más universal y uniformizada?. Aunque nuestros hábitos y formas de cocinar o de consumir alimentos están cambiando, ni Roca y Del Bas creen que perderemos nuestras referencias culinarias. Pero el futuro está ahí, advierten. Y el reto de afrontarlo desde la sostenibilidad y la suficiencia alimentaria también.