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Aburto asegura que no permitirá que 'nadie' impida el diálogo social
El consejero de Empleo dice que no van a imponer el diálogo social, pero tampoco permitir que 'nadie lo impida'. Ve difícil la participación de ELA en el proceso de diálogo que abrirán tras el verano
Redacción
El consejero de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, Juan María Aburto, ha dicho que, desde su Departamento, no van a "imponer" el diálogo social, pero tampoco van a permitir que "nadie lo impida", y ha considerado "difícil" la participación de ELA en el "proceso de diálogo" que tienen previsto abrir tras el verano.
En un acto en el Ayuntamiento de Bilbao, Aburto se ha pronunciado de esta manera tras la finalizar la ronda con sindicatos y agentes sociales impulsada por el Departamento de Empleo para ver las posibilidades de retomar el diálogo social.
Aburto ha asegurado que mantienen "el compromiso que yo he asumido de convocar un proceso diálogo social". Por ello, ha anunciado que, a la vuelta del verano, abrirá "un proceso de diálogo donde aquellos agentes que quieran participar lo van a poder hacer".
"Las dificultades son serias y después de esta ronda de conversaciones seguimos viendo muy difícil la participación de ELA, pero ese es un análisis que ellos tendrán que hacer y del que ellos tendrán que responder, no solamente ante sus propios afiliados, sino también a la clase trabajadora de este país", ha concluido.
CCOO se muestra "muy escéptica"
El secretario general de CCOO-Euskadi, Unai Sordo, ha expresado el planteamiento "abierto" de su sindicato respecto al dialogo social, pero se ha mostrado "muy escéptico" y "no optimista" sobre la posibilidad real de que se lleve a cabo, debido al posicionamiento que mantienen ELA y LAB.
"Es evidente que el objetivo de ELA es destrozar lo poco que queda en pie en el ámbito socioeconómico y que LAB siente vértigo a tomar cualquier decisión. Ha tomado el papel de subalterno de ELA", ha dicho Sordo, en una rueda de prensa en Bilbao.
En su opinión, ante la negativa a participar estos dos sindicatos en el diálogo social, la "gran incógnita" se sitúa en el Ejecutivo vasco y en si aceptará una mesa de negociación sin ambas centrales.